La tenista María Sharapova dijo este martes que está muy ilusionada con su regreso a la competición el próximo mes sintiéndose satisfecha por la reducción de su sanción por dopaje y fortalecida en este tiempo que ha estado fuera de las pistas.
La rusa, antigua número 1 del mundo, fue inicialmente castigada con dos años de sanción tras dar positivo en el Open de Australia 2016 por meldonium, un medicamento que había estado tomando durante 10 años que cumplía las reglas pero que fue reclasificado como una sustancia prohibida. Sharapova peleó con mucha fuerza para que se anulase la prohibición, argumentando que no había sido advertida debidamente del cambio. El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) redujo la sanción a 15 meses y dijo en su fallo que no creen que Sharapova «se dopara de forma intencionada».
«Aunque me encontraba en una etapa de mi carrera en la que estaba más cerca del final que de mis inicios, siempre quieres poner fin a un capítulo de tu vida como tu quieres, con tu propia voz», explicó Sharapova en la conferencia ANA Inspiring Women in Sports en Mission Hills. «Esa es la razón por la que he luchado para que la verdad salga fuera», dijo la cinco veces ganadora de un Grand Slam en una ponencia en la que también participaron la histórica Billie Jean King, pionera en el tenis femenino, la campeona olímpica de gimnasia Aly Raisman y la golfista Lexi Thompson.
La suspensión de Sharapova terminará dos días después del inicio del torneo de Stuttgart (24 abril). Ella ha recibido una invitación de los organizadores, que han programado su primer partido para el miércoles en su regreso a la competición. Algunas jugadores se han enojado por el trato preferencial que ha recibido Sharapova a la hora de lograr invitaciones. La tenista rusa fue durante 11 años seguidos la deportista con más ganancias según la revista Forbes. «Para mí no está bien, y he hablado con otras jugadoras y ninguna está de acuerdo con ello, pero no hemos sido capaces», dijo Dominika Cibulkova a medios eslovacos. «No tengo nada en contra de ella, pero todos aquellos que se han dopado deberían empezar de cero».
Sharapova dijo que no está preocupada por el recibimiento que pueda tener y confía en su honradez. «Cuando amas lo que haces y lo haces con pasión, honradez y trabajando duro, y trabajas en la pista 28 cuando no hay nadie mirando… entonces sabes dónde estás y quién eres. Cuando estaba en la pista 28 y no había nadie mirando es cuando gané muchos de mis trofeos».
Sharapova, que cumplirá 30 años el 19 de abril, ha estado muy ocupada durante su ausencia en el circuito. Ha ido a clases en la Universidad de Harvard, ha estudiado 10 días en Londres sobre liderazgo y publicidad, una semana trabajando para el comisionado de la NBA Adam Silver y una semana con los diseñadores de Nike y atendiendo los asuntos de su marca de golosinas Sugarpova. «He aprendido que la vida también puede estar bien sin tenis», dijo Sharapova que también ha terminado su autobiografía que sacará el próximo mes de septiembre. La rusa está impaciente por volver a la competición. «He estado entrenando muy duro durante los pasados cuatro meses», dijo, añadiendo que le llevará algún tiempo ponerse a punto. «Un entrenamiento no es lo mismo que un partido. Sé que mi mente y mi cuerpo tienen la motivación para jugar el mejor tenis que pueda».