Cuestión de preguntas. Y del verbo poder. ¿Puede permitirse McLaren una temporada entera de malos resultados con motor Honda? ¿Puede permitirse McLaren no participar en algunos grandes premios pero acabar delante con un motor Mercedes?
La cuestión es que el equipo de Fernando Alonso llevas tres semanas evaluando la opción de cambiar de motorista ya para esta misma temporada, sí la que empieza en poco más de una semana. En principio parece una locura, pero lo cierto es que esa opción está sobre la mesa.
En primer lugar podría ser una medida de presión extrema sobre Honda tras una pretemporada muy complicada en la que han podido comprobar como todos sus temores sobre la competitividad de la unidad de potencia japonesa antes de poner el coche en pista se quedaban cortos. Una vez han llegado a ese punto y Eric Boullier declaró en AS que con el motor Mercedes estarían ganando carreras, todo puede pasar.
La prensa inglesa ha publicado que uno de los grandes accionistas de McLaren ha hablado con Mercedes para la próxima temporada, pero los alemanes tienen motores disponibles para esta misma. Estamos hablando de los que estaban preparados para Manor y se han quedado sin poder utilizarse tras la renuncia de la pequeña escudería británica.
La postura oficial de McLaren al respecto es esta después de que un portavoz hablase con AS: «Las pruebas de invierno fueron un gran desafío y resultaron decepcionantes. Ahora estamos trabajando con Honda para resolver los problemas y deficiencias. Y estamos considerando opciones con Honda, pero no comentaremos sobre la especulación con los medios».
Es decir dejan claro que han hablado con Honda para solucionar la situación, pero también que junto a los japoneses han considerado opciones que podrían pasar por romper el contrato a largo plazo que les une. A partir de aquí hay que ver si les compensa pagar por los motores o que les paguen por usar determinados motores y ahí echan cuentas del dinero que podrían ganar con un propulsor Mercedes y del que podrían dejar de ganar con el Honda. Estamos hablando de los resultados y el dinero que ganan las escuderías. Los alemanes estarían encantado de aparecer como salvadores de un equipo legendario como McLaren en una perfecta operación de markéting. Aunque también se podrían considerar otras opciones como Renault.
La mala pretemporada del equipo hizo perder la paciencia sobre todo a Mansour Ojjeh, el hombre de negocios saudí, dueño de una parte importante del equipo, y a la familia real de Bahrain que estarían dispuestos a poner el dinero necesario para romper el contrato con Honda y conseguir motores competitivos para que el equipo vuelva a las posiciones de cabeza.
Otra cosa son los pilotos. Honda también invierte en McLaren una parte que va a pagar los sueldos de Alonso y Vandoorne y no es descartable que la escudería inglesa intente que ambos pilotos dejen de cobrar esa parte para ser más competitivos. Algo que no creemos que el asturiano acepte.
Mientras todo esto sucede, en Honda están trabando día y noche para solucionar los problemas y llegar a Australia con una unidad de potencia digna para terminar la carrera y poder evolucionar durante la temporada.