Tras los múltiples problemas de fiabilidad del motor Renault durante la primera semana de test, la situación en Toro Rosso parece no ser ya tan crítica de cara a la primera cita del Mundial en Melbourne.
En el último día de test de la temporada de Fórmula 1 2017, Carlos Sainz ha sido el encargado de pilotar el monoplaza de Faenza. El piloto español ha logrado el tercer mejor tiempo de la jornada, parando el crono en 1:19:837 con gomas ultrablandas.
Si bien Sainz ha quedado a más de un segundo del tiempo marcado por Kimi Raikkonen con superblandos, el Toro Rosso ha terminado el día en la misma décima que el Mercedes y Renault con los mismos neumáticos.
Además, el piloto madrileño ha completado 132 vueltas al trazado catalán. Un registro donde se incluye una simulación de carrera que ha permitido comprobar a los italianos que todavía deben mejorar la fiabilidad, ya que Carlos Sainz se veía obligado a detener el coche en la línea de meta.
Un último día en la oficina para Sainz bastante positivo y que permite a Toro Rosso ilusionarse con cumplir su objetivo ya desde la primera carrera de la temporada: liderar la parte media de la parrilla.