SANTO DOMINGO. El coordinador de la unidad de cirugía laparoscópica y bariátrica del Hospital Traumatológico Ney Arias Lora, reveló ayer que en el centro de salud se está realizando la aplicatura gástrica, una nueva técnica quirúrgica menos riesgosa para pacientes en sobrepeso, que se hace en el sector privado de la República Dominicana y otras naciones con exitosos resultados para adelgazar.
En un comunicado de prensa, el doctor Gustavo Rodríguez Blanco informó que es una cirugía que se puede practicar en la mañana y el paciente ser enviado a la casa en la noche porque no conlleva cortes, pues se realiza vía laparoscópica, con instrumentos más pequeños que los convencionales.
Manifestó que la técnica de la aplicatura gástrica se hace por vía de laparoscópica y se logra que el estómago se desmonte de parte de su curvatura millor y luego se invagina hacia dentro, dándole la forma de un tubo con múltiple sutura de un material no absorbible.
Dijo que al estómago se le cambia la arquitectura en un tubo que se hace restrictivo, lo que hace que el paciente coma menos y baje de peso.
Esta técnica quirúrgica está diseñada para los pacientes que están en sobrepeso ligero moderado, y que tienen algunas morbilidades entre las que se encuentran hipertensos o diabéticos, con una obesidad de primero a segundo grado, aunque hay casos que se han hecho con tercer grado.
Informó que esta cirugía está diseñada para una persona que no es tan obesa, y que ha fallado en los métodos tradicionales de pérdida de peso con dieta y ejercicio.
La ventaja de esta cirugía es que no se corta el estómago, es reversible, si el paciente piensa que está perdiendo mucho peso o no se siente cómodo con la cantidad de comida que ingiere puede deshacerse la técnica aplicada, explicó el galeno.
Dijo que el estómago no ha sufrido ningún corte, sino que ha sido suturado, lo cual puede liberarse porque es reversible, a diferencia de los demás métodos técnicos aplicados en la cirugía bariátrica, entre los que cita el bay pass y la manga gástrica.
Explicó que esta cirugía está diseñada para pacientes que quieren perder 40 o 50 libras y no lo han logrado, y que el riesgo es mínimo porque no hay corte.
Precisó que en ninguno de los casos se tiene que dar sutura en las heridas porque son mínimas, mientras que el dolor es muy débil. El paciente puede reintegrarse a sus labores en una semana, sin ninguna dificultad, agregó.
El doctor Rodríguez Blanco aseguró que la ventaja de la pérdida de peso está muy garantizada con el procedimiento para estos pacientes.