SANTO DOMINGO. RD$3,000, RD$4,000 y RD$5,000 mensuales: estos son algunos salarios que se devengan en las filas del Cuerpo de Bomberos de la República Dominicana.
“Arriesgamos la vida a cambio de nada”, expresa Candelario Villar, intendente general del Cuerpo en Santo Domingo Norte.
Y es que los bomberos dominicanos no solo están desnudos de un sueldo que les alcance para cubrir sus necesidades básicas, la mayoría de los que brindan este servicio a la ciudadanía dominicana tampoco cuentan con un seguro de salud u otros beneficios de la Seguridad Social.
“La situación de los bomberos debe cambiar, el presidente Danilo Medina debe tomarnos en cuenta”, demandó el coronel José Antonio Segura Feliz, coordinador de la Unión Nacional de Cuerpos de Bomberos (Unabomb).
Con muchas limitaciones para trabajar
Durante una reunión realizada este sábado, los bomberos manifestaron que existen estaciones de bomberos en el país que no cuentan ni siquiera con camiones para cumplir la principal función del Cuerpo de Bomberos: apagar el fuego.
Es el caso de localidades como Nizao, Hato Viejo de Guerra, Mamá Tingó (Yamasá) y recientemente Los Alcarrizos.
En este municipio de 272,476 habitantes, el único de tres camiones que servía para atender emergencias tuvo un accidente justamente cuando se usaba en un servicio y quedó inhabilitado.
Si bien los bomberos reconocen que han recibido algunos camiones de parte del Gobierno, destacan que la mayor parte es “chatarra” fabricada hace casi 20 años-en el 1999 o el 2000-.
Además de los vehículos especiales para sofocar incendios, los bomberos demandan apoyo de instituciones como la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) para que les facilite cumplir con eficiencia el trabajo que pese a sus dificultades realizan.
A esta organización en particular les piden que habilite los hidratantes, de donde se abastecen para llenar los camiones de agua, de manera que no tengan que ir tan lejos a suplirse en situaciones donde el tiempo vale vidas.
De igual manera, la Unabom solicita que se les incluya en los planes de mejoramiento y construcción de obras públicas.
Por Alaiska Cuevas