Logística de la F-1. La pretemporada en pista consistirá en ocho días de test en el Circuit Barcelona-Catalunya para los que Pirelli, suministradora única de neumáticos, llega con un arsenal de compuestos. Nada menos que 3.520 que se dividen en 810 juegos de 2017 y 80 de reserva de la pasada temporada. Los nuevos compuestos, que mantienen la llanta de 13 pulgadas pero son seis centímetro más anchos en el tren delantero y ocho en el trasero, se subdividen en 23 juegos de duros, 263 de medios, 287 de blandos, 74 de superblandos, 51 de ultrablandos, 67 de intermedios y 45 de lluvia.
Tremenda amalgama de opciones para que las diez escuderías del campeonato realicen las pruebas pertinentes para aclimatar su chasis a los novedosos compuestos de Pirelli que facilitarán frenadas más tardías, un paso por curva más veloz y una salida superior de ella al aumentar considerablemente la superficie de contacto con el asfalto. Novedades que tendrán una más en estas pruebas ya que si no llueve entre el lunes 27 de febrero y el miércoles 1 de marzo, el jueves 2 se regará la pista con camiones cisterna para que las escuderías prueben obligatoriamente con los compuestos de lluvia.