Alonso rejuvenece doce años

Habla rápido, cuenta historias y te enseña con cada palabra, es un genio loco, uno de esos italianos apasionados con el trabajo y la vida, alguien capaz de correr veinte kilómetros en una tarde entre los pueblos de las montañas austriacas. Por ejemplo. Edo Bendinelli tiene un nuevo reto este año, aunque tiene el mismo nombre: hacer que Fernando Alonso llegue en perfecto estado de forma al primer gran premio en Australia.

Y esta vez es diferente porque los coches van a ser mucho más exigentes en el aspecto físico, son más grandes, tiene más agarre y aerodinámica, el paso por curva es más veloz y se soportarán mayores fuerzas G. Todo eso nos lleva a otra época y esa será uno de los privilegios de Alonso porque tiene que volver al cuerpo, el entrenamiento y el aguante físico que tenía hace doce años, en los de sus dos títulos mundiales. «Se vuelve a ese momento y puedo decir que Fernando está en su mejor momento de forma, más fuerte y motivado que nunca, tengo claro que si el coche responde él lo llevara al límite como siempre o más allá del límite, esa es su mayor fortaleza como piloto», declara a AS.

¿Y cómo lo va a conseguir? «Fernando aguanta bien el entrenamiento, el trabajo aeróbico de estos años le ha venido bien, pero ahora hay más gimnasio, más pesas, se necesita más fuerza, pero sobre todos nos estamos centrando en el llamado entrenamiento funcional para que Fernando esté al mismo nivel que en 2005 o 2006, cuando tenía 25 años», sostiene Edo. ¿Qué es exactamente ese tipo de entrenamiento? Según Roberto Gordillo, uno de los expertos consultados por AS tiene su origen en la rehabilitación y está basado en movimientos multiarticulares cuyo objetivo debe ser concreto para conseguir una utilidad real en la práctica de un deporte. «Se utiliza para mejorar la fuerza y el acondicionamiento total como alternativa al gimnasio convencional, se usan cintas, tablas de equilibrio y otros ejercicios», cuenta Gordillo.

El entrenamiento de Alonso está enfocado al pilotaje y es una mezcla de gomas, pesas, gimnasio, pero también trabajo aeróbico de bici o carrera, es muy completo sobre todo para que el cansancio físico no le impida tener una concentración total y su capacidad de respuesta sea extrema. «Estos años apenas necesitaba entrenar, ahora hace ejercicios con pesas de 10 o 15 kilos, parece poco pero es más exigente que levantar cien en un banco de pesas», explica Bendinelli.

«Fernando es un enfermo del deporte, entrena bien y con regularidad siempre, tiene quince años de experiencia como deportista al máximo nivel y eso se nota y hace todo más fácil», dice Edo. Pero va a hacer un año de uno de los accidentes más terribles de su carrera, ¿alguna secuela? «Absolutamente nada, fue importante con lo del pulmón, pero quedó perfecto», declara. «De todas maneras su estado real se verá en los test y en Australia, este año no solo podremos ver cómo van los coches si no también los pilotos en el físico, y Fernando estará más fuerte y con su aspecto de toro de aquella época», cierra Edo. ¿Volverán los títulos? Como hace doce años…

Fuente