Amor a primera vista. Hay escépticos que no creen en él, pero existe. En la Fórmula 1 también o, mejor dicho, con la nueva Fórmula 1 también. Los elementos que dan forma a los próximos monoplazas encandilan a todo el que lo prueba. Carlos Sainz fue el primero en compartir sus sensaciones tras probarla en el simulador. «Impresiona y divierte», dijo el de Toro Rosso. Y otro piloto que se ha puesto frente al volante virtual, Nico Hulkenberg, apunta en la misma dirección: «Los nuevos coches son brutalmente rápidos».
El alemán ha quedado igualmente impresionado con lo que ha probado en el simulador de Renault. Uno de los circuitos que ha probado en él es el de Barcelona, usado como referencia tradicional y donde comenzarán a rodar de verdad el 27 de febrero. «Las curvas 3 y 9 se hacen completamente a fondo, lo que Red Bull o Mercedes hicieron en el pasado», cuenta Hulkenberg en ‘Auto Motor und Sport’, dando por buenos los datos de simulación que deslizó uno de los motoristas a comienzos de mes: se irá el 70% a fondo cuando antes se iba el 50%.
Pero no hace falta analizar los tiempos para ver la rapidez que han ganado los nuevos coches, se ve a simple vista. «Sin mirar los tiempos puedes ver que los coches son más rápidos, y no sólo en las curvas. Las distancias de frenado son más cortas porque se puede retrasar la frenada al tener más aerodinámica y neumáticos más anchos», analiza Andy Green, director técnico de Force India, que, eso sí, avisa que habrá cosas que no cambiarán: «El efecto DRS es mucho más pronunciado, aunque en Mónaco no se podrá adelantar».
Volviendo a Hulkenberg, comenta la preparación que ha hecho para este año, que, como la de todos, está siendo más agresiva: «Diría que estoy entrenando de un 20 a un 30 por ciento más. Comencé antes de Navidad y después de Año Nuevo continué. Mi entrenador y yo hemos diseñado un plan de dos horas por la mañana y dos por la tarde, con un entrenamiento especial para el cuello. Puedo prometer a todos que será realmente duro pilotar otra vez». Cada opinión que leemos de la nueva F1 va por el buen camino. Ojalá no salgamos de él.