Apareció en 2008 y no pasó para nada desapercibida. Red Bull fue el primer equipo que se atrevió a montar esta estrafalaria solución en su RB4 y el resto de equipos no tardaron en copiarles hasta hacer que la aleta de tiburón se propagará por toda la parrilla. Con ese ingenioso nombre se llamó al ala en el que terminaba el capo motor y que en ocasiones llegó a juntar la chimenea con el alerón trasero, y ahora vuelve a estar de actualidad porque la nueva reglamentación de la Fórmula 1 puede traerla de vuelta este año.
Sabíamos que los próximos coches van a lucir alerones, suelo y chasis de mayores dimensiones y que montarán ruedas más grandes, pero pocos contemplaban la posibilidad de volver a ver la aleta de tiburón. La prensa alemana ya avisó de esa posibilidad hace unas semanas y ahora es la propia web oficial del Mundial la que contempla esta idea. El motivo de su posible regreso radica en el diseño modificado del alerón trasero, que ahora será más ancho (de 750 mm a 950mm) y menos alto (de 950mm a 800mm).
Estas nuevas medidas se traducirán en que la parte trasera de los monoplazas sufrirán más turbulencias debido a las corrientes de aire que llegan del eje delantero y las suspensiones, y el regreso de la aleta ayudaría a reducirlas, sobre todo en las curvas. De esta forma, se cree que algunos equipos incluirán en sus diseños este añadido que la reglamentación de 2011 tiró abajo, es más, en ‘Auto Motor und Sport’ apuntaron que «prácticamente cada equipo está apostando» por esa opción.
Curiosamente, una de las formaciones que lo descartaría sería la misma que le hizo ver la luz hace ya nueve años, Red Bull. Tradicionalmente, el coche de la escudería energética siempre corre con mucho rake (ángulo de inclinación) que solventa por sí mismo ese posible problema con las turbulencias al dirigir el aire por debajo del alerón trasero. Según vayan dándose las presentaciones de los equipos (la primera de Renault está fechada el 21 de febrero), iremos viendo quien adopta esta idea que afecta notablemente a la estética de los monoplazas.