SANTO DOMINGO. El Ministerio de Salud admitió este jueves que pese a haberse reducido la mortalidad materna, esta sigue siendo demasiado alta, por lo que el Ministerio de Salud ha colocado ese indicador entre los principales resultados de impacto del sector durante 2017, meta que se propone lograr a través de mejorar la calidad de los servicios.
El Ministerio cita que entre los cinco primeros lugares en las causas de muertes maternas figuran los trastornos hipertensivos del embarazo (39.34%), septisemia o infecciones (27.87%), shock hemorrágico (17.21%), y el aborto (3.28%) mientras otros eventos de salud aportan de manera combinada (12.30% al indicador).
Orientado a mejorar las estadísticas que registra ese índice, el Ministerio de Salud continúa capacitando a su personal, mientras al mismo tiempo fortalece los protocolos relacionados con la atención obstétrica que atacan las causas de defunciones vinculadas al parto y al embarazo en los centros de salud, tanto públicos como privados.
“Garantizar una atención de calidad a la embarazada desde el Primer Nivel de Atención, garantizar los medicamentos de calidad desde allí, terminar la Guía de Pre-eclampsia para aplicar en todo el país e iniciar las discusiones para disminución de los partos por cesáreas son algunos de los aportes del Ministerio para bajar la mortalidad materna”, explicó la ministra Altagracia Guzmán a connotados líderes de opinión.
Afirmó que la corrección de factores que inciden en las sepsis, como los vinculados a las condiciones de infraestructura, de quirófanos y hotelería de hospitales y clínicas, son algunos focos de atención para lograr el objetivo, que forma parte de once resultados de impacto que se han propuesto las instituciones del sector salud gubernamental.
La ministra Altagracia Guzmán Marcelino explicó que una de las dificultades que afronta la corrección de ese indicador de salud es de orden cultural, pues parturientas extranjeras residentes en el país no tienen el hábito de seguir las indicaciones de hacer las consultas y chequeos prenatales. Por esa razón ellas aportan el 33% de las muertes maternas que ocurren en el país.