La inteligencia dominicana dio un intenso seguimiento al exilio en Benidorm, España, del derrocado presidente Juan Bosch, entonces líder del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), desde su salida en 1966 hasta 1968, y le atribuían alentar un estado de agitación interna y un ambiente de subversión en el país.
El seguimiento incluyó sus conferencias, reuniones y declaraciones ante medios españoles, en los que opina sobre democracia y dictaduras en América, insostenibilidad del gobierno de Balaguer, desarrollo de la tesis Dictadura con Apoyo Popular, revolución en América y paradero de Francisco Alberto Caamaño Deñó.
También, presentación de las conferencias El Caribe, Frontera Imperial, Hostos, Maestro Integral de Hispanoamérica; La República Dominicana: El País de la Arritmia Histórica e Iberoamérica Ante sí Misma.
Bosch, presentado por el PRD y respaldado por otras organizaciones aliadas, ganó las elecciones presidenciales del 20 de diciembre de 1962. Asumió el poder el 27 de febrero de1963, pero sufrió un golpe de Estado el 25 de septiembre de ese mismo año.
En la introducción de la cronología se transcribe la información publicada en el periódico ‘Las Provincias de Valencia’, del día 3 de noviembre de 1966:
“Frankfurt, 2 (EFE) El Partido Revolucionario Dominicano (P.R.D.) del ex presidente Juan Bosch ha caído completamente bajo control de elementos de extrema izquierda, que consiguieron 14 de los 16 puestos del Comité directivo durante el reciente congreso del partido, anuncia hoy el diario conservador ‘Franckfurter Allgemeine’, en un despacho fechado en Santo Domingo”.