Familia duda de la versión de militar sobre causa de la herida de una joven

LA ROMANA. Familiares de una joven herida de bala en la cabeza el pasado 31 de diciembre descartaron que haya intentado suicidarse y manifestaron confiar en que las autoridades arrojarán luz respecto al caso cuyo sospechoso, un sargento del Ejército, se encuentra detenido.

Claribel Mateo Velásquez se encuentra ingresada en el Centro Médico Central Romana después de que supuestamente el padre de su hijo, el militar Wander Guerrero Pichardo, de 40 años, la hallara herida. El sargento alega haber llegado al apartamento en la tarde y que luego, poco después de las 7:00 de la noche, salió a buscar cinco cervezas a un colmado. Agregó que a su regreso encontró a la mujer herida.

“La conocemos como una joven alegre, simpática, nunca ha sufrido de depresión. Esa tarde ella estaba preparando un sancocho, una fiesta”, declaró la hermana Estefany Castro Velásquez, quien junto a otros parientes improvisó una rueda de prensa frente al citado centro médico.

Los parientes de la joven de 31 años dicen que resulta extraño que las autoridades no hayan encontrado las cervezas.

Un disparo hizo impacto en el borde de la pared que da acceso al baño, según pudo constatar la prensa. Uno de los casquillos fue localizado dentro de un tarro que se encuentra en el pasillo, entre el baño y la habitación donde yacía el cuerpo de Claribel. El otro casquillo estaba en la puerta del dormitorio de un niño de tres años procreado por la pareja.

Empero, los familiares esperan los resultados de balística y la prueba de parafina. El arma en poder de las autoridades es una pistola calibre 40 milímetros, de porte ilegal.

Otros parientes que ofrecieron declaraciones a la prensa fueron el padre Emilio Mateo, el tío Juan Santana y la hermana Ramona Velásquez.

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