Las apuestas siguen alterando el pulso del tenis. Así lo ha revelado Sam Groth, 180º del mundo y un jugador, por lo tanto, que se mueve habitualmente en el circuito de Challengers, la ‘segunda división’.
El australiano de 29 años concedió una entrevista a The Weekend Australian donde reveló que ha tenido que pasar por situaciones muy desagradables: «He recibido amenazas de muerte contra mí, mi familia y mi novia. Todo está yendo demasiado lejos con las apuestas».
Groth se queja de haber recibido amenazas cuando ha perdido algún partido y eso ha conllevado que algún apostador perdiera su dinero. «He hablado con la ATP, porque se ha llegado a situaciones que son totalmente inaceptables», apunta.
En España, este mismo mes, se detuvo a 34 personas, entre ellas varios tenistas modestos, por amañar partidos en relación a las apuestas.