Veamos los números. 101 puntos, la temporada que más ha sumado desde que está en la F1 (y lleva seis), 29 de diferencia sobre su compañero, dos podios con el cuarto mejor coche de la parrilla y las diez últimas carreras puntuando, algo que sólo hicieron Rosberg y Ricciardo. Con estas cifras, es normal que Sergio Pérez considere 2016 como el mejor año de su trayectoria y que reivindique una vez más su talento. Sin embargo, todavía hay quien le mete en las alforjas su mal año en McLaren y le cuestiona, algo que al mexicano le cuesta comprender.
Han trascurrido tres años desde que Checo pasó por Woking y cree que ya ha demostrado con garantías al volante del Force India de qué madera está hecho, más que nunca este año en el que ha acabado séptimo, por eso le frustra que algunos no le reconozcan su mérito: «Es difícil, a veces frustrante. Lo das todo, tienes excelentes resultados y mucho tiempo no obtienes el crédito que mereces. Conseguir los resultados que logré este año ha sido increíble, e incluso así hay personas que cuestionan mi potencial».
«Creo que ha sido mi mejor temporada simplemente basándome en los resultados que logré y en el nivel de consistencia que mantuve durante todo el año. No es fácil anotar puntos en 10 carreras consecutivas. En las posiciones que solemos iniciar las carreras es muy fácil tener incidentes y no teníamos el nivel para estar en los puntos, por lo que conseguirlo demuestra que fue mi mejor año», asegura Pérez en declaraciones a ‘Motorsport’ sobre un 2016 en el que ha destacado a pesar de que esperaba todo lo contrario cuando empezó
«Al principio pensé que la temporada podía ser una pesadilla. Estábamos muy lejos. Williams era ocho décimas más rápido, Toro Rosso medio segundo… No fue fácil, pero mejoramos hasta convertirnos en el cuarto mejor equipo», explica aliviado. Estará un año más en Force India, ¿y luego?: «Espero que la oportunidad me llegue pronto. Me siento muy preparado. Cuando llegué a McLaren no tenía la experiencia que tengo hoy. Sin duda, estoy en el mejor momento para estar en un equipo de alto nivel». No solo son palabras. Habla en el asfalto.