El desagüe era de 2,52 metros cúbicos y la entrada 1.72, según reporte oficial
El complejo de embalses Tavera-Bao, sigue estando en el “ojo del huracán” de las autoridades de manejo de presa, debido a la cantidad de agua que ha estado ingresando, a causa de las lluvias, donde ayer su nivel máximo se coloco a 3,26.18 sobre el nivel del mar.
Autoridades que manejan el acueducto de Santiago que llevan un control horas tras horas de la presa, informaron que la 1.24 minutos de la tarde del lunes, el desagüe era de 2,52 metros cúbicos y la entrada 1.72 metros cúbicos por segundos.
El pasado domingo las casi 4 horas de lluvias torrenciales entraban en un momento al embalse Tavera Bao, 900 metros cúbicos por segundo, por lo que hubo la necesidad de verter alrededor de 500 metros cúbicos para mantener el equilibrio.
De acuerdo a lo expuesto por las autoridades el manejo atento e inteligente de la presa Tavera ha evitado tragedias por las inundaciones.
Mientras que el temor que embarga a la mayoría de las familias que viven en zona de fácil desprendimiento de terreno o inundaciones, es que sigan las lluvias.
El terreno de los pueblos del Cibao se encuentra saturado por las lluvias constantes de casi un mes, por lo que se cree que nuevas lluvias constituyen un riesgo para las regionales que como el Bajo Yaque y Yuna, no soportan una gota mas.
El daño a la producción agrícola es incalculable por las autoridades agropecuaria, sobre todo a las plantaciones de plátano, guineo, yuca y batata.
El caso de Montecristi, Manzanillo, Mao, Esperanza y Dajabon, el problema es más grave porque son zonas productivas que dependen de la exportación de banano, por lo que al ser afectada la cosecha, se reduce el negocio a niveles alarmantes.