Caroline Garcia ganó a Petra Kvitova, por 7-6 (6) y 6-4, y enmendó el panorama de Francia en la final de la Copa Federación en Estrasburgo ante la República Checa, que tomó ventaja con la agónica victoria de Karolina Pliskova ante Kristina Mladenovic después de tres horas y 47 minutos de partido.
La primera sesión del duelo por el título de la Copa Federación cumplió con las expectativas. Dejó la situación equilibrada y la lucha por el trono que ostenta el combinado checo abierta.
Las primeras raquetas de cada equipo cumplieron con su papel y se repartieron los triunfos. Caroline Garcia, 23 del mundo, encauzó la final para Francia, que aspira en el Rhenus Sport a lograr el tercer título de su historia, el primero como local, para derribar, además, la hegemonía de la República Checa, dominadora en tres de las últimas cuatro ediciones.
En el cierre de la jornada, la presión no condicionó a la jugadora local, que se impuso a Petra Kvitova, undécima del mundo. Fue clave el primer parcial, resuelto en el desempate. Lo ganó la francesa, que mantuvo la dinámica. Y lo acusó la checa, que sufrió un bajón en el inicio del segundo set que le llevó a una desventaja insalvable (4-1).
Garcia cerró el partido después de una hora y 50 minutos. La mitad del tiempo que estuvieron sobre la pista, casi cuatro horas, Karolina Pliskova y Mladenovic.
Fue un choque épico. Con 30 juegos disputados en el tercer set (6-3, 4-6 y 16-14) para dar el primer punto a la República Checa en la final.
El Rhenus Sport de Estrasburgo vibró con este interminable choque que abrió la final de la competición. Pero el aliento de los 6.200 espectadores no fue suficiente para que la jugadora gala superara a su rival.
La checa, sexta jugadora del mundo, encarriló el partido al lograr el primer set pero su rival, 42 del ránking femenino, respondió con solvencia y llevó el desenlace al tercer parcial.
La manga definitiva fue épica. Cada jugadora se aferró a su saque. Mladenovic tuvo su ocasión tras hacer ‘break’ y situarse con 13-12 y el servicio de su lado. Pero Pliskova enmendó la situación al romper en el juego siguiente.
La tenista checa se mantuvo más firme físicamente. Mladenovic aprovechaba cada intercambio de pista para ser atendida del agotamiento físico al que se vio sometida. Luchó hasta el final, pero no pudo cerrar el triunfo y su rival dio el primer punto al combinado checo, que busca el tercer título seguido y el décimo de su historia.
El empate a triunfos deja la situación equilibrada y a expensas del domingo, con otros dos partidos individuales y el dobles para coronar al nuevo campeón.