«Influencia excesiva» o «administración insuficiente», elijan cualquiera de las dos acepciones que recoge la RAE para la palabra ‘burocracia’ y entenderán de lo que se quejan en Ferrari. En la Scuderia pasaron de dar una palmadita en la espalda a los comisarios de la FIA a querer clavarles un puñal tras las horas en las que pensaron que iban a volver a casa con un trofeo bajo el brazo. Una sanción les dio el podio y otra se lo quitó. Primero contentos, luego enfadados, incluso estafados. Así se sintieron los italianos con Arrivabene a la cabeza.
El jefe de la formación del Cavallino Rampante no pudo ocultar el disgusto con el que acabaron después de tener ritmo y estrategia para acabar en el podio: «Podría haber sido un día especial. Hemos merecido este podio, pero nos lo han quitado por burocracia, fantástico… Nuestra estrategia nos ha permitido tener un buen ritmo durante toda la carrera y ambos pilotos han hecho un trabajo muy bueno. Por desgracia, nos han penalizado con una decisión inapelable que, en mi opinión, es demasiado dura y de alguna manera injusta».
Decisión injusta, asegura el italiano. Repasemos lo hechos. Era la penúltima vuelta, Vettel se encontraba en medio de una emboscada de Red Bull. Verstappen se había saltado una chicane, no le cedió la posición e hizo todo por frenarle para que Ricciardo pudiera superarle. Y eso intentó. Cogió el rebufo de Sebastian y se tiró al interior de la curva 4. El alemán le vio, y se fue echando al interior dejándole el mínimo espacio, incluso se rozaron, pero la FIA consideró que cambió de dirección en la frenada y le sancionó horas después con 10 segundos.
Resultado: Vettel pasó de ser cuarto a tercero para acabar quinto. Algo injusto para Ferrari y correcto para Red Bull. «Ha habido mucho debate acerca de los movimientos en las frenadas y se hizo uno claramente. Si hubiera sido antes de este fin de semana quizá habría estado bien, pero las reglas son claras. Hemos tenido un escenario inusual con Max en el prepodio, Seb en el podio y Daniel llevándose el trofeo, pero estoy contento de que se haya tomado la decisión correcta», afirmaba Christian Horner. La alegría, como las sanciones, fueron por barrios…