El mundo evoluciona, aunque no siempre hacia adelante. Esta frase atribuible a cualquier pensador moderno entronca con la alta tecnología de la F-1. El Mundial que lidera Nico Rosberg es a su vez el líder en tecnología de la automoción y eso supone avances gigantescos con el paso de los años. Habrá quien le guste más o menos respecto a la F-1 del pasado, pero en algunos aspectos la mejora es indiscutible. Uno de ellos es los pasos por boxes.
Esta temporada, Williams ha batido el récord del mundo realizando un pit stop completo, es decir, cambiando las cuatro ruedas. Un relámpago casi inapreciable a la vista si no estás muy atento: 1.92. Fue en Bakú, en el GP de Europa con Massa al volante. Comparando con el inicio del campeonato, en 1950, las diferencia son abismales. Uno de las primeros vídeos que constan del Mundial pertenece a la carrera disputada en Indianápolis en la primera temporada de la F-1. Y ahí, el pit stop de Bill Holland con su Deidt de motor Offenhauser duraba 76 segundos, más de un minuto y dieciséis segundos. Cosas del avance tecnológico…