SANTO DOMINGO. En el mundo existen alrededor de 800 millones de personas que padecen la inseguridad alimentaria, es decir, uno de cada nueve individuos no cuentan con los alimentos para tener una vida saludable. De estos, dos tercios se encuentran en países con niveles de renta per cápita media, principalmente en Asia.
“Globalmente estamos progresando y las estadísticas sobre mal alimentación están bajando. Pero todavía hay millones (de personas) en el mundo que están siendo afectadas en las zonas de conflicto”, analiza el director de la División de Políticas del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA), Stanlake Samkange.
Con experiencia en trabajos sobre las problemáticas del acceso a la alimentación adecuada en países como Uganda y Angola, Samkange explica que el reto principal de la organización a la que representa es lograr la erradicación del hambre en el mundo y que para ello evalúan las formas más efectivas para ayudar a los países a cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
“La situación de cada país es distinta. No hay una fórmula global para alcanzar la erradicación del hambre”, sostiene el director de la PMA, quien es egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad de Stanford, Estados Unidos.
Destaca que, pese a que en muchos países se ha logrado reducir el hambre, existen zonas vulnerables donde el flagelo no se ha podido abordar o reducir, sobre todo porque, pese al crecimiento económico que pudiesen experimentar algunas economías, no todos sus ciudadanos alcanzan dicho progreso.
Afirma que a nivel global, los pobres gastan el 70 % de sus ingresos en comida, lo que dificulta el logro balanceado de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, los cuales –apunta- deben enfocarse hacia todas las áreas.
Reconoce que en el caso de República Dominicana ha habido progreso en materia alimentaria, de acuerdo con los datos que ha manejado, aunque considera que en ocasiones las estadísticas pueden esconder información sobre algunos problemas concretos.
Una de sus propuestas es lograr que los agricultores puedan lograr una productividad suficiente para asegurar sus medios de vida y que pueda llevarse a cabo de manera sostenible.
África
Nativo de Zimbabue, Samkange conoce a fondo la problemática del continente africano en términos del acceso a una alimentación adecuada.
Expone que, pese a que la situación no es monolítica y que cada país tiene características y enfrenta retos distintos, es el área subsahariana la zona de mayor vulnerabilidad.
Señala que, pese a los progresos que han logrado los países del cono sur de Africa, hay otros, como Sudán del Sur o la República Popular del Congo, donde la situación ha empeorado por los efectos de los desastres naturales y por otro lado, debido a los conflictos armados que han tenido lugar en estas naciones.
“Es algo que nos preocupa bastante”, manifiesta el director del PMA, quien se muestra optimista sobre la posibilidad de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible para el año 2030.
Cree que los países deben comprometerse para lograr la erradicación del hambre y pone el ejemplo de China, que se ha propuesto dar solución al problema hacia el 2020.