SANTO DOMINGO ESTE. La desesperación se apodera de las familias afectadas por la crecida del río Ozama en los sectores “La Lata”y “La Lechuga”, del La Barquita Vieja, así como en “Ribera del Ozama”, en Los Mina Viejo porque no ha podido regresar a sus viviendas y pierden la esperanza de ser reubicado como se les prometió.
En Ribera del Ozama, que está ubicado debajo y a ambos lados del puente de la 17 en su cabecera Este, unas 17 familias están reubicadas en la iglesia San Lorenzo y otros dos locales de evangélicos.
La mayoría de las familias conviven en medio de las casas donde el agua invade todas las viviendas.
Wellington Santos y Ferdaris Sánchez explicaron que están pasando muchos trabajos y que vienen con dificultades desde las tormentas “Olga” y “Noel”.
“Cuando Olga y Noel nos dieron un incentivos para que pagáramos casas para luego darnos una vivienda dignas y a no dárnosla nosotros volvió otra vez a la orilla del rio”, dijo Sánchez.
En ese lugar el río se mantiene desde hace tres días por la mitad de las viviendas y como dice Zunilda Martínez, estaban bajo agua con niños que se están enfermando.
“Nosotros no queremos que venga y que nos censen y nos den una funda de comida, ni un chin de ropa ni un colchoncito viejo, nosotros queremos que hagan algo definitivamente con nosotros, pero no solo eso, por aquí no ha pasado nadie, excepto la familia Estrella y la Defensa Civil y el diputado Luis Alberto ”, explicó Martínez.
Pero el “La Lata” y “La Lechuga”, perteneciente a la Vieja Barquita el trama no es menor, aquí decenas de familias tienen amontonados todos sus ajuares en un callejón de la parte alta a la espera de ser trasladas a los apartamentos que se construyó para ellos en la Nueva Barquita.
Fausta Taveras cuenta que tienen varios días durmiendo con lo poco que tiene en el callejón que da acceso a la orilla del río y como corrobora Josefina Oviedo apenas han mudado cuatro familias dentro del programa de reubicación.
Explica que las autoridades les han prohibido hablar con la prensa so pena de no entregarle su vivienda, pero la versión la rechaza la dirigente comunitaria Lissette Alcántara, quien informó que miércoles fueron llevadas a la Nueva Barquita 27 familias antier 4, pero que es un proceso que hay que hacerlo con orden.