“El largo período de hegemonía política del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), que gobierna desde 1996 de manera ininterrumpida, salvo durante el período entre 2000-2004, y la debilidad institucional han provocado que en estos últimos años el país sea percibido como uno de los más corruptos de Latinoamérica“, afirma un informe de la consultora Llorente y Cuenca, que tiene sus oficinas principales en España.
El escrito subraya que en el país centroamericano la corrupción y el clientelismo políticose han repetido en varias ocasiones a lo largo de la historia.
“No en vano, el régimen de Trujillo (1930-1961) ha sido considerado como el de los Somoza en Nicaragua, como una cleptocracia“, destaca.
Además, resalta que en esta década, el caso de corrupción más sonado fue el de Félix Bautista. El senador dominicano de la provincia San Juan de la Maguana estuvo envuelto en enriquecimiento ilícito, lavado y falsificación.
“Transparencia Internacional incluyó a Félix Bautista en el cuarto lugar de la lista de personas, empresas y Estados que simbolizan la ‘Gran Corrupción’, con el fin de abrir una votación pública en busca de la figura más notoria de corrupción”, explica el informe de Llorente y Cuenca.
Las afirmaciones de la consultora están contenidas en su informe “La corrupción, el talón de Aquiles de las democracias latinoamericanas”. Al referirse, en general, al impacto de la corrupción en los países y en la actividad política, advierte que “esta situación provoca que cada vez sea más necesario y urgente regular eficazmente la presencia del dinero en la política“.