El local es vieja casona de madera dañada que no permite la concentración de magistrados
Por Nelson Peralta
JANICO, Santiago.-Las labores del Juzgado de Paz del municipio de Jánico se desarrollan en medio de muchas precariedades, debido al deterioro y las pocas condiciones que facilita el local donde se alojan sus oficinas, una casona de madera de los años 60s, remendada que no aguanta más reparaciones.
Este tribunal, ubicado en la calle Federico Pichardo No. 1 de Jánico tiene un activismo judicial muy dinámico, donde cuya jueza suplemente es la magistrada Jarolyn E Rosario López, y el procurador fiscal Héctor Taveras.
Esta casa de madera descompuesta no da seguridad ni tranquilidad a los magistrados, abogados y procesados para el desarrollo de las audiencias.
Mucho ruido y el sol que penetra por las rendidas de las podridas tablas que aún conserva este local, donde opera el Juzgado de Paz.
Reporteros de este diario realizaron un recorrido por todas sus aéreas, comenzando por la sala de audiencia que está en la primera pieza, oficinas de los magistrados Taveras y Rosario López, que no es digno para el desarrollo de las funciones de estos profesionales de la justicia.
En iguales, situación de deficiencias operan las secretarias de ambos funcionarios judiciales, donde además de carecer de espacio físico para sus funciones cuentan con equipos tecnológicos atrasados que muchos no recién mantenimientos desde hace 7 años.
“Esta computadora y la impresora no reciben mantenimiento hace tiempo y por eso, esta—(la impresora) imprime cuando quiere”, dijo una empleada.
El baño donde magistrados, personal y visitantes deben hacer sus necesidades, esta al igual que el resto de la casa abandonado, con una manguera conectada al lava mano desde una barrica para llevar el agua. La puerta principal del sanitario es de manera y tiene pedazos destruidos que amenaza la privacidad de quienes se vean obligados a usarlo.
Este tribunal de funcionarios que inician sin fallar el rol de audiencia a las 9 de la mañana no tiene la más mínima concentración porque al pasar el vehículo o las voces de la calle y otras oficinas obstaculiza el desarrollo de los procesos.
Las autoridades de la Procuraduría General de la República y la Suprema Corte de Justicia, que debieran tomar acciones para mejorar la operatividad de este Juzgado de Paz, están al pendiente.
De acuerdo a informaciones recogidas en el lugar por este periódico han sido muchas las ocasiones que han acudido a hacer mediciones, estudios y levantamientos para el supuesto inicio de los trabajos de construcción de un edificio decente y digno para la administración de justicia en este pueblo, pero no se ha hecho nada al respecto.
Pero las condiciones actuales de este local, no le perte el funcionamiento adecuado de este Juzgado de Paz, porque las condiciones materiales afectan las labores, por lo que debiera, por lo menos procurarse la renta de un espacio físico que por lo menos de seguridad a magistrados, secretarias, ministerial y encargado de “mantenimiento”, un señor que aparenta ser colaborador de la vieja casona.