Santiago.-Desde tempranas horas de hoy se desarrolla una amplia jornada para identificar a los vendedores informales que habitualmente realizaban las ventas de pulgas en los alrededores del mercado Central de Pueblo, cuyo crecimiento desordenado y caótico obligaron a su cierre temporal por parte de la Alcaldía de Santiago.
Tal y como fue anunciado ayer por el alcalde Abel Martínez y el presidente de los pulgueros, Luis Jiménez, el proceso se desarrolla en los mismos puestos donde se realizaban las ventas todos los jueves.
A cada uno de los vendedores y vendedoras de pulgas se les está llenando un formulario con la información personal, nombre, documento de identidad, lugar de residencia y su número telefónico.
Otras informaciones requeridas tienen que ver con los productos que venden y la identificación del punto que han ocupado en las ventas que realizaban en ese mercado.
El Alcalde Abel Martínez, anunció ayer la reubicación de esos vendedores a otro lugar, el cual será anunciado el próximo lunes, ya que se están ultimando algunos detalles sobre su puesta en funcionamiento en un área ya identificada.
Se prevé que a partir del próximo jueves las ventas estarán realizándose en el nuevo lugar, aunque todo dependerá del montaje y acondicionamiento del lugar.
Ayer en rueda de prensa el dirigente de los pulgueros agradeció en nombre de la asociación que los agrupa, el trato recibido por el alcalde Martínez, quien en todo momento dejo abierta la mesa del dialogo.
Jiménez, aseguró que al lugar donde serán llevados estarán más seguros que donde han estado durante estos últimos años y que se han comprometido con las autoridades a mantener limpias las áreas que le corresponden a cada vendedor, entre otros acuerdos.
Este levantamiento además de organizar a los pulgueros y a establecer un mercado garante del orden, la higiene y la convivencia pacífica, tal y como lo quiere el alcalde Abel Martínez, también ayudará a los compradores a identificar a los vendedores, ya que serán dotados de un carnet de identidad.
El proceso de levantamiento marcha sin inconvenientes, aunque con la presencia de agentes del orden público, para evitar enfrentamientos.