Una mayor cuota de energía renovable contribuirá a reducir emisiones de CO2 en un 23% y ahorrará billones de dólares
La República Dominicana puede aumentar la cuota de energías renovables modernas en su matríz energética de 9 a 27% para 2030, según un nuevo informe dado a conocer hoy por la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA).
El informe Renewable Energy Prospects: Dominican Republic (Perspectivas para la energía renovable: República Dominicana) indica que, sólo en el sector energético, el país podría aumentar su cuota de renovables de 12 a 44% para 2030.
“La República Dominicana puede convertirse en uno de los países líderes en despliegue de energías renovables en la región Caribe” — afirmó Dolf Gielen, director del Centro de Innovación y Tecnología de IRENA — “Si el gobierno actúa de inmediato para aumentar su cuota de renovables, el país puede reducir su contaminación atmosférica, mejorar su seguridad energética, potenciar su economía y desempeñar un papel líder en la lucha global contra el cambio climático”.
De acuerdo con el informe, los principales desafíos y oportunidades para la Republica Dominicana se encuentran en el sector energético. Con las políticas actuales, el porcentaje de renovables en generación eléctrica solamente llegará a 21% para 2030, quedando muy por debajo del objetivo nacional de 25% para 2025. Si se aprovechan, en cambio, los amplios recursos del país, principalmente en energía solar y eólica, las energías renovables podrían constituir hasta un 44% de la producción eléctrica nacional para 2030.
Para alcanzar la meta de 27% de renovables en la matríz energética nacional, se necesita una inversión anual estimada de 566 millones de dólares entre ahora y 2030. Lograrlo resultará en ahorros netos anuales de hasta 5,3 billones de dólares para 2030, si se tienen en cuenta factores como la salud de la población y la reducción de las emisiones de carbono.
El informe de IRENA recomienda un conjunto de acciones que pueden contribuir a alcanzar el potencial de renovables en el país, por ejemplo, establecer objetivos claros y homogéneos sobre energías renovables, diseñar incentivos y mecanismos de mercado oportunos y planificar infraestructuras de transporte de energía y expansión de redes eléctricas, entre otras medidas. Las recomendaciones del informe, concretamente su enfoque innovador para integrar energías renovables variables en el sector eléctrico, proporciona un modelo aplicable a otras islas.
“Muchos países insulares enfrentan desafíos similares en seguridad energética y acceso a la energía” — declaró Gielen — “Por esta razón, las medidas propuestas en este informe pueden ser de gran utilidad para muchos otros países, más allá de la República Dominicana”.
El informe forma parte de la hoja de ruta para la energía renovable de IRENA, REmap 2030, que proporciona un plan para duplicar la cuota de energías renovables en la matriz energética mundial para 2030. Las hojas de ruta de REmapdeterminan el potencial de los países para aumentar proporcionalmente sus tecnologías de energía renovable en el sector eléctrico y otros sectores de consumo final tales como la construcción, la industria y el transporte.