El All England Club celebra estos días una sesión de homenajes con ‘Barnardo’s’, la asociación británica de Escuelas de Caridad (Children’s Home) que ha venido aprovisionando de recogepelotas al club y al torneo de Wimbledon… durante los últimos 150 años. Los recogepelotas (‘ballboys’) más reputados venían de la Escuela de Goldings, bajo recomendación y designación de sus profesores. A partir de 1969, sin embargo, el All England abrió el listado a otras escuelas de los barrios de Merton, Sutton, Kingston, Surrey y Wandsworth.
AS tuvo oportunidad de conversar en la Terraza de Jugadores del All England Club con Peter Knight, de 84 años y de Middlesex: el último recogepelotas del torneo de 1946, primero que se celebró en Inglaterra desde 1939, a causa de la II Guerra Mundial. Knight, que se declara ‘fan’ apasionado del West Ham United y vive en Twickenham, junto al histórico estadio de rugby, afirma: «En 1946, yo tenía 14 años. Nos habían dicho que estuviéramos preparados para estar en el torneo de 1945, pero al fin este no se pudo celebrar porque la Guerra y sus efectos estaban demasiado recientes y las bombas habían destrozado fuertemente varias dependencias del club. Al fin pudimos acudir en 1946.Podías ver esos destrozos por todas partes, pero se jugó el torneo».
«Nos entrenaban muy duro para ir a Wimbledon, con bolas de tenis y en pistas de hierba natural. Teníamos que ser muy rápidos. Ahora lo recuerdo con todo el cariño y la ilusión: nosotros conocimos a jugadores famosos como Jaroslav Drobny, el francés Petra o Dorothy Bundy, que me admitía a calentar con ella y me regaló una raqueta. Y además, comíamos gratis las fresas con nata (‘cream’). Hoy se trata de un juego completamente diferente. Miro la hierba, las raquetas y los mismos jugadores… y es algo que nada tiene que ver con aquellos tiempos. Comparada con la de mis tiempos, la hierba parece artificial«: y Peter Knight apunta a la hierba de la terraza exterior del All England.
Peter Knight sigue recordando: «He visto a muchísimos jugadores, pero siempre me impresionaron todos aquellos que tenían carisma, como un halo, como podían ser Mr. Drobny o Bjorn Borg, quizá el mejor tenista que he visto. De las damas, pues recuerdo a Miss Bundy, por tantas razones». Y recorre su fe futbolística: «Mi corazón va con el West Ham United y el mejor futbolista que recuerdo es Sir Trevor Brooking (estrella legendaria del West Ham)… así como nuestro equipo campeón de la Cup en 1975, con Frank Lampard (padre), Billy Bonds, Paddon, Keith Robson… pero Brooking era el mejor de ellos». De todas formas, Knight tiene sus votos particulares: «A Sir Stanley Matthews le vi un día controlar un balón en movimiento con el campo mojado y diluviando de un modo que a nadie vi a hacer. No creí que eso pudiera ser posible hasta que lo vi. Tampoco he visto ningún portero como Gordon Banks. Y jamás he cantado en mi vida unos goles con tanta fuerza como aquellos cuatro que nos dieron la Copa del Mundo de 1966: precisamente ante los alemanes».