SANTO DOMINGO. Un joven de 26 años estuvo a punto de renunciar a su trabajo en Santo Domingo para aceptar un puesto que le ofrecieron falsos reclutadores del 9-1-1 en Santiago, pertenecientes a una supuesta red que la Policía dio a conocer hoy a la opinión pública.
El joven, que ofreció su testimonio a Diario Libre, a raíz del apresamiento de 17 personas vinculadas al falso proceso, dijo que envió su curriculum a través de un amigo, que también sería reclutado para trabajar en el Sistema Nacional de Emergencias.
“Yo llegué a viajar dos veces a Santiago. Fue a una entrevista normal en un aula de la biblioteca de la UASD en Santiago, que no sé cómo ellos consiguieron”, detalló.
Prosiguió que en esa primera entrevista había 33 personas en busca de empleo, pero en la segunda, “éramos como 118”. En este segundo encuentro le ofrecieron una inducción del sistema, y los supuestos reclutadores ya tenían asignados los puestos de cada uno e impreso los carnés de identificación.
“A mi amigo le dieron el puesto de asistente administrativo y a mí de operador. Iba a ganar veintiocho mil pesos”, contó.
“Ellos nos dijeron en la segunda reunión, que el entrenamiento iba a ser aquí en Santo Domingo. Que nos iban a dar una tarjeta de nómina, donde íbamos a cobrar por ahí, que pasáramos por el banco que la tarjeta de nóminas estaría ahí, y que nos iban a dar nuestro carnet…”. El 27 de este mes, supuestamente estarían en nómina.
No sospechó
El joven asegura que nunca le pidieron dinero durante el proceso, por eso no sospechó que se tratara de un engaño.
“…ellos armaron un grupo en whatsapp… yo no estaba, pero, se armó algo en el grupo por el horario que le asignaron a las personas, el horario me lo mandaron a mi correo con el sello del 9-1-1 y todo eso. El joven (que identifica como Rounel Domingo Cepeda Nuñez, de 27 años, uno de los apresados por la Policía) eliminó el grupo de whatsapp… y mandó un mail diciendo ‘que su curriculum será revaluado…’ y después me mandaron un correo diciéndome que sí, que fui aceptado nuevamente…”. Explicó que fue lo único que éticamente le pareció extraño.
“Como ellos lo hicieron fue muy planeado, porque tu no piensas que fuera un engaño”, expresó.
Ante la experiencia, aconseja: “que no dejen su trabajo si no tienen un contrato”.
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