La mejor vara de medir a un piloto es comparándolo con su compañero de equipo. Esa es una premisa básica que utilizaremos para ver el rendimiento que han mostrado Sainz y Ricciardo con el mismo coche que Verstappen, el piloto que comparte protagonismo esta temporada con Hamilton por sus sobresalientes actuaciones. «Carlos tiene una velocidad similar o igual que Max», dijo alguien que les conoce bien, el jefe de Toro Rosso Franz Tost, hace un mes, y los números le dan la razón…
Y es que se puede afirmar que el español empató con el holandés mientras coincidieron en Toro Rosso en condiciones de igualdad. En un análisis frío y rápido de los datos esto podría parecer una incongruencia, puesto que en las 23 carreras que compartieron coche Verstappen le ganó 9 a 12 a Sainz los domingos (sin contar dobles abandonos), lo que se traduce en 66 a 22 en puntos. Una amplia distancia a favor del primero que se reduce si descontamos las carreras en las que alguno de los dos sufrió un falló técnico.
Así, en un análisis más justo, porque no se tiene en cuenta el factor fiabilidad ajeno a las capacidades de los pilotos, el resultado es un empate a seis. Carlos salió especialmente perjudicado por los problemas de Toro Rosso, sufriendo alguna avería o contratiempo en siete grandes premios de 2015 y uno de este año (Bahrein). Mientras que Max sólo tuvo que soportar la mitad: tres la pasada temporada y uno esta (Rusia). Una diferencia que a simple vista desequilibra la estadística a favor del holandés sin remedio.
Una vez ha quedado demostrada la igualdad de rendimiento de Sainz con Verstappen, damos el salto a Red Bull junto a este último para compararle con su actual compañero, un Ricciardo al que le está costando hacer frente al empuje del joven talento. En las seis carreras que llevan pilotando el RB12, el australiano pierde 2 a 4 con el holandés y, a diferencia de lo que pasaba con Sainz, aquí no hay que restar ningún resultado puesto que el único abandono, el de Verstappen en Mónaco, fue por un error de pilotaje.
Aunque Daniel se ha mostrado muy superior a Max en calificación (5 a 1), el punto débil que Horner pidió reforzar al recién llegado, cuando se reparten los puntos la balanza se decanta claramente por Verstappen: 77 a 64. Cierto es que el australiano tiene margen para equilibrar este duelo ya que sólo llevan seis grandes premios juntos, pero un primer análisis arroja datos que le dejan en mal lugar, en uno peor que el que tuvo Sainz. Quizá por eso Carlos esté acaparando cada vez más miradas…