Compitieron frente a frente por fabricar la mejor idea para proteger la cabeza del piloto, algo con lo que la FIA lleva obsesionada en materia de seguridad desde que ocurrieron accidentes como el de Jules Bianchi en Suzuka 2014. Una vez descartada la propuesta de Red Bull, el Aeroscreen, todos los esfuerzos se centran en el Halo creado por Ferrari, e incluso el equipo energético quiere ayudar en su perfeccionamiento. Así, el RB12 que conduce Pierre Gasly en el test de Silverstone ha salido a la pista con él.
Sólo lo ha hecho para dar una vuelta de instalación, lo justo para captar la atención de los fotógrafos que vigilan el asfalto y lo único que se han atrevido a rodar los dos equipos que lo han montado alguna vez. El último en hacerlo fue Vettel en los primeros libres del anterior GP de Gran Bretaña, el mismo que luego dijo que «necesita probarse más»: «Tenemos que asegurarnos de introducir algo más seguro en todas las circunstancias y que no nos comprometa».
Sebastian no es el único que arroja dudas sobre el desarrollo de un Halo que la FIA se ha propuesto implantar en 2017. Christian Horner va un paso más allá y lo critica abiertamente: «No soy un gran fan del Halo y las limitaciones que tiene. Es una solución poco elegante. Preferiría que hubiera más tiempo para investigar y hacer el trabajo correctamente en lugar de apresurarse y hacer algo que pueda tener otras consecuencias. Sin duda, no votaría a su favor». Al Halo le queda un largo camino por recorrer…