Echarle la culpa al mensajero es la excusa más utilizada para matizar y hacer ver ante la opinión pública que determinadas declaraciones no son como en un principio salieron a la luz. ‘Se han sacado de contexto’, es la frase más habitual. Sin embargo, en la era del avance tecnológico muchas veces esa explicación raya lo absurdo. Al lío. Niki Lauda dijo a la televisión austriaca ‘Servus TV’ que Hamilton destrozó su habitación de hotel en Azerbaiyán y que no dijo la verdad sobre la llamada ‘paz de la piscina’ y su relación con Rosberg. Exactamente las palabras del tricampeón fueron: «Yo estaba allí cuando Lewis rompió su habitación de hotel en Bakú, después de estrellarse contra el muro. Me dijo que no entrara porque lo iba a destrozar todo. Por supuesto, él mismo pagó los daños. La situación empeora cada vez que Rosberg gana. Lewis se volverá más salvaje cuanto más adelante esté Nico. Mintió sobre su relación con él».
Tras la lógica repercusión mediática, en Mercedes hoy han emitido un comunicado explicando la nueva versión del propio Lauda sobre lo sucedido: ‘Daños en la habitación de Bakú, 2ª parte. El no destrozo’. Esta es la nota íntegra: ‘Tras sus declaraciones para Servus TV, grabadas antes del Gran Premio de Austria, a Niki Lauda le gustaría aclarar un asunto y afirmar lo siguiente: Lewis Hamilton no dañó de ninguna manera la habitación del hotel ni su habitación privada en el circuito durante el fin de semana de carreras en Bakú y tampoco mintió sobre su relación con su compañero de equipo, Nico Rosberg. Niki lamenta el malentendido causado por sus comentarios, los cuales fueron exagerados y sacados del contexto en que fueron realizados’. Que cada uno saque sus propias conclusiones…