«Ha sido una gran batalla este partido con Marin Cilic y, aunque yo lo intenté y creí hasta el final, he tenido suerte de seguir en el torneo. Estoy sorprendido de cómo vengo jugando aquí tras haber renunciado a Roland Garros. La clave fueron los siete partidos que jugué entre Halle y Stuttgart, con la información que me dieron de cómo podía jugar y cómo no podía. Lo siguiente que sé es que estoy en semifinales de Wimbledon». Así reflexionó Roger Federer su comparecencia en la Sala Principal del All England Club. En las semifinales de este viernes, Federer se medirá al canadiense Milos Raonic.
Así fue el análisis de Federer sobre su batalla de cinco sets con Cilic: «Estuve todo el tiempo en problemas, fue algo continuo. Sentía que los ‘aces’ llovían sobre mí… 15 o 20 saques directos en contra en los dos primeros sets es algo muy raro si no es con Isner o Karlovic. Con 3-3 y 0/40 en el tercero, dos sets abajo, si continúas adelante es que has tenido suerte Esta es una gran victoria, muy emotiva, no sé si una de las más grandes de mi carrera, pero sí muy grande».
Federer reveló: «Mental y físicamente nunca dejé de creer, a pesar de situaciones como esa del tercer set y cuando levanté los tres puntos de partido en contra, en el cuarto. Cilic tuvo sus oportunidades, pero es que resultaba muy difícil salir adelante con tu servicio. No podía jugar libremente, pero era por culpa de Marin. Me siento feliz de encontrarme tan fuerte como sentí. Todo iba sucediendo muy rápido y yo tuve que seguir luchando hasta que tuve mis oportunidades. A mí solo me ponen nervioso las leyendas del deporte cuando vienen a mis partidos, como Jack Nicklaus u otros. Eso es algo que está bien, pero entonces yo me digo a mí mismo: ‘Será mejor que juegues bien, para no decepcionarles»».