Directora Luz María Fernández dice esta es etapa desarrollar y adquirir aprendizajes
SANTIAGO.-En un emotivo y concurrido acto la escuela Salomé Ureña vio desfilar a cuarenta niños del nivel Inicial, en el marco de la ceremonia de graduación que se llevó a cabo recientemente en el referido centro escolar, ubicado en el sector de Barrio Obrero de Santiago.
La actividad se desarrolló el viernes 24 de junio del año 2016, donde hubo canciones, desfiles con grupos de porristas, abanderados, y un compartir para los niños, sus padres e invitados.
En el acto la directora del Centro educativo, licenciada Luz María Fernández entregó de una placa de reconocimiento a la técnico del nivel Inicial, licenciada Minirka Guzmán, por sus aportes y empeño en beneficio de la calidad educativa, cualidades que la hacen merecedora de tan importante reconocimiento.
La placa fue entregada por la licenciada Fernández y la profesora del nivel Inicial, licenciada Carmen Rodríguez.
Durante su discurso, la directora del Centro Educativo, Salomé Ureña, la magister Luz María Fernández, dijo “para mí es de grato placer que estemos reunidos como comunidad acompañando a los niños del pre-primario en su acto de graduación, lo que es motivo de alegría para los niños, sus padres y para nosotros como escuela”.
“El pre primario es un grado de transición con la básica primaria, es de vital importancia reconocer que los niños y niñas de este nivel tienen todas las potencialidades para desarrollar y adquirir aprendizajes. En esta etapa, en la que prima el juego, la fantasía y la percepción del mundo, los sujetos están ansiosos de entender lo que les sucede, lo que les rodea; conocer lo que el mundo les presenta día a día, ansiosos de encontrar respuestas que le satisfagan en su mundo personal”, sostuvo.
Indicó que los niños y niñas que ingresan al grado de transición son poseedores de unos saberes que han adquirido en sus relaciones consigo mismo, con las personas que le rodean, con los objetos, en sus vivencias y situaciones.
Y agregó la magister que “estos saberes les permiten desarrollar nuevos conocimientos, modificar los que tenían y crear expectativas frente a otros”.
Declaró la licenciada Luz María Fernández que esto quiere decir que los niños desde que nacen, están en disposición de aprendizaje, y lo logran por sí mismos, pero en especial con la mediación de sus padres y adultos que le rodean.
Y sostuvo que de este aprendizaje a temprana edad depende mucho la importancia de pensarlos como seres en construcción y con posibilidades de formar parte de la sociedad del conocimiento.
“En este grado los maestros hablan de Dimensiones, las cuales hacen énfasis en el desarrollo de la persona. Pero poniendo en consideración que en esta etapa de la vida los sujetos tienen las condiciones para aprender y hacer”, indicó.
Al mismo tiempo, la directora del Centro Educativo Salome Ureña, que es por eso que el Ministerio de Educación hace hincapié en el desarrollo de competencias en este nivel.
Puso de manifiesto que desarrollar competencias es una acción educativa de respeto por los niños y niñas que los acepta como sujetos de aprendizaje que no solo imitan o repiten trabajos preparados por otros, sino que se convierten en protagonistas de su propio proceso.
“Este propósito se logra cuando se fomenta y propicia en los estudiantes el uso de sus habilidades en prácticas “situadas” para proponer y actuar frente a la realidad inmediata, comprender el entorno e interactuar con las personas que les rodean”, añadió la licenciada Fernández.
Entiende que en consecuencia, tener niños y niñas competentes permite potenciar una infancia feliz y que desarrollar competencias en esta primera fase de escolarización permite un descubrimiento más significativo de la realidad y una respuesta más creativa ante las situaciones y experiencias que viven.