Era líder Didier Pironi de aquel campeonato, pero cuando sufrió un accidente en Alemania un finlandés no dejó pasar la oportunidad y gracias a buenos resultados no muy brillantes se puso líder. A falta de tres citas para el final del Mundial de 1982, Keijo Erik Rosberg ganó el GP de Suiza por delante de Prost y Lauda, su primera victoria. Ganó con una sola victoria su primer y único título de Fórmula 1. Ahora el hijo de Keke, Nico es el favorito para conseguir el campeonato desde su posición de líder, pero sin embargo el padre es la inspiración para uno de los rivales.
Y es que en Ferrari han echado mano del ejemplo de Keke para pensar en el título. «Es muy fácil remontar en la tabla de puntos. Tenemos que ser positivos. En Canadá no estábamos lejos de Mercedes. En Bakú, pareció que estábamos mal pero luego subimos al podio. Para mí estaría bien ganar el campeonato con una victoria, como hizo Keke Rosberg», ha dicho Maurizio Arrivabene.
El jefe de la Scuderia sigue confiando en sus posibilidades y adelanta mejoras: «Los ingenieros no duermen. Habrá algunas sorpresas, porque nuestros ingenieros de chasis duermen todavía menos». Y es que Vettel aún tiene posibilidades, es tercero a 45 puntos y Raikkonen cuarto a 60.
Arrivabene tiene claro que todo puede cambiar y confía en los podios para llegar al título: «No es sólo una cuestión del número de victorias, sino sobre cómo puedes presionar a los que están delante. Debemos tomar en consideración que Rosberg y Hamilton se restarán puntos entre ellos, porque de otra manera sería complicado. El Mudial es largo y hemos tenido muchos días desafortunados, mientras que ellos sólo han tenido un día malo». Pero si tenemos que estar pendientes de lo que hagan los demás…