Opositor venezolano Capriles viaja en busca de apoyo en OEA

caprilesBUENOS AIRES.— El líder opositor venezolano Henrique Capriles alertó el lunes que su país vive una crisis terminal y advirtió que si «Venezuela explota» afectará a toda la región.

Hizo la advertencia durante una gira que realiza por Paraguay, Argentina y Brasil en busca de respaldo para un referendo revocatorio del mandato de Nicolás Maduro.

«Queremos comunicar directamente lo que estamos viviendo en nuestra Venezuela. Venezuela vive la peor crisis de nuestra historia», dijo Capriles a periodistas tras reunirse con el presidente argentino Mauricio Macri en la Casa de Gobierno. «Vinimos para que conozcan la realidad de lo que está atravesando el país».

En una improvisada rueda de prensa, que tuvo un final abrupto por la presencia de un grupo de manifestantes pro-chavistas, Capriles afirmó que «tenemos mucha expectativa en que nuestros hermanos de América del Sur entiendan que lo que pase en Venezuela también los afecta acá. Aunque esté lejos, si Venezuela explota también tiene incidencia en Argentina, en toda la región».

El encuentro de Capriles con Macri había generado expectativas luego de las duras críticas de un sector de la oposición venezolana contra el gobierno argentino por no apoyar la aplicación de la Carta Democrática de la Organización de Estados Americanos (OEA).

«No hubo ningún giro», respondió Capriles al ser consultado sobre la postura del mandatario argentino, quien como líder de la oposición fue un férreo crítico de la alianza comercial e ideológica de su antecesora Cristina Fernández con el gobierno chavista. «Macri sigue manteniendo la misma posición de siempre», agregó el también gobernador del estado de Miranda y líder de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática.

«Capriles golpista», «Viva la resistencia del pueblo venezolano» y «Fuera golpista» gritaron dos jóvenes argentinos mientras Capriles dialogaba con los periodistas.

«Que venga Capriles acá a asesorarse con Macri para ver cómo puede derrocar a Maduro es una falta de respeto a la democracia», comentó a periodistas Joaquín Pérez Suárez, uno de los activistas.

Más temprano, Capriles estuvo reunido en Asunción con el presidente de Paraguay, Horacio Cartes.

Capriles comentó que el mandatario paraguayo escuchó sus inquietudes «y le agradecí por la posición expuesta en el Consejo Permanente de la OEA en donde pidió el respeto a los derechos humanos en mi país. Le pedí al presidente que no nos deje solos y que Mercosur y Unasur le digan a Maduro que respete la constitución».

Capriles sostuvo que «los venezolanos sabemos que en esta situación actual la única solución pacífica es electoral. Hay una salida democrática que es el referendo. En estos momentos miles de venezolanos hacen cola (fila) para comprar alimentos y medicinas. Si Venezuela tiene una explosión social, tendrá secuelas en toda la región. Eso no queremos».

Entre el 20 y 24 de junio, los más de 1,3 millón de venezolanos a quienes les fueron validadas sus firmas a favor del refrendo contra Maduro tendrán que ratificarlas en los 24 centros de votación que habilitará el Consejo Nacional Electoral venezolano.

Tras esta primera fase, la oposición venezolana tendrá que recolectar más de cuatro millones de firmas para activar formalmente la consulta popular, que normalmente debería extenderse hasta 2018.

En las últimas horas del lunes viajará a Brasilia para una audiencia con el canciller de ese país.

Venezuela sufre una profunda crisis económica por una desbordada inflación, severos problemas de escasez de alimentos y medicinas y una recesión económica que amenaza con agravarse por la caída del precio del petróleo, la principal fuente de ingresos por exportaciones del país.

El gobierno asegura que la crisis es consecuencia de una «guerra económica» promovida por sectores opositores.

«La situación en mi país es crítica y no es para mirarla con indiferencia, supera el estado meramente diplomático. Los venezolanos no nos merecemos vivir así. ¿Dónde están los dólares y los recursos provenientes del petróleo? La pobreza en mi país alcanza el 80%», acotó Capriles.