Dos golpes bajos te pueden hacer caer a la lona. No es fácil saber encajarlos, pero no queda más remedio si quieres ponerte en pie de nuevo para seguir buscando la victoria. Daniel Ricciardo ha terminado dos grandes premios seguidos rebosando frustración. Sentía que los triunfos de Barcelona y Mónaco era suyos, especialmente este último ya que la pole en el Principado es casi sinónimo de victoria. Por eso, el australiano no puede evitar pensar que se le está pasando el tiempo.
El piloto de Red Bull es uno de los talentos más importantes de la parrilla de la Fórmula 1 y él lo sabe, y cree que su calidad debería tener más recompensa que las tres victorias y la única pole, la que logró en Mónaco, que luce su palmarés. «He mantenido la cabeza alta toda la temporada. Parte de lo frustrante es, y no quería decirlo porque es arrogante, que creo mucho en mi habilidad y tendría que haber sido más recompensado», asegura en declaraciones a ‘Sky Sports’.
Cuando dio el salto al primer equipo energético en 2014 pensaba que eso le acercaría más al título, pero le ha resultado imposible, como a cualquiera que no fuera piloto de Mercedes. «Pronto tendré 27 años, ni siquiera me he acercado al título y creo que debería tener algo así muy pronto. Podía haber logrado dos victorias en dos semanas», dice resignado Ricciardo. Por culpa de su equipo ha dejado de ganar 20 puntos con los que sería segundo, quizá eso le haga pensar que deba apostar su oportunidad al rojo…