Pese a molestias que se ventean en hombro y muñeca, Novak Djokovic (con camiseta térmica bajo el polo de juego) ya se halla en sus décimos cuartos de final de Roland Garros, tras sellar a su favor un duro cruce con el castellonense Roberto Bautista Agut, tercer tenista español por ranking. Fue 3-6, 6-4, 6-1 y 7-5 para Djokovic después de tres horas y 12 minutos sobre el arenal pastoso que ahora es la Philippe Chatrier.
La lluvia había suspendido el partido, la víspera, con 4-1 para Djokovic en el tercer set. También se trata de la presencia consecutiva número 28 del serbio en los cuartos de final de un evento de Grand Slam En la cuarta manga, Bautista disfrutó de 4-2 y saque, tras quebrar el servicio del número uno (6/11 en puntos de rotura a favor de Bautista), pero todo el juego de piernas y la movilidad del castellonense no fueron suficientes ante el infinito arsenal de recursos del serbio, que dominó por 45-31 en golpes ganadores. Además, intervino el resto machacante de Djokovic, que limitó a 17 el total de puntos ganados por Bautista con segundo saque: 17/40, 43%.
Sin embargo, la cuenta de errores no forzados resultó favorable a Bautista: 49… contra los 54 que cometió Novak, quien sí produjo hsta 22 oportunidades de rotura sobre los saques de Bautista, aunque solo aprovechó el 41%: 9/22. En cuartos, Djokovic chocará con el ganador del duro pulso que ahora mantienen Ferrer y Berdych en la Lenglen. «Sigo vivo… y ahora espero jugar mañana», fueron las frases más significativas de Djokovic (en francés) al fin del partido, aún sobre la Chatrier… y tocado con la capucha amarilla de un chubasquero.