Juntando el final de 2015 y el inicio de 2016, llevaban diez victorias seguidas, y habrían sido once de no ser por el incidente de carrera entre Hamilton y Rosberg en Montmeló que se saldó con el abandono de ambos. Y es que, a día de hoy, esa sigue siendo la realidad. Ha de pasar algo anormal para que no gane un Mercedes. Han dominado, dominan y dominarán la era híbrida de la Fórmula 1 a no ser que alguien lo evite. Y ese alguien quiere ser Bernie Ecclestone.
El magnate inglés tiene ese propósito y quiere utilizar el reglamento para ello. «Quiero cambiar las cosas, quiero parar el dominio de Mercedes», dijo en Barcelona ante los micrófonos de ‘Sky’. Sin embargo, su igual en las altas esferas de poder, Jean Todt, no tiene tanta fijación por dar fin a este ciclo del equipo alemán porque lo ve algo normal: «Siempre me pregunto si la gente tiene memoria selectiva. El dominio en el mundo del motor, o incluso en el deporte en general, es una parte de él».
«Hace 50 años era el Lotus de Jim Clark y Colin Chapman, luego llegó el dominio de Williams, el de McLaren, el de Ferrari, el de Red Bull y ahora el de Mercedes. En lugar de hablar sólo del dominio de un equipo, habría que fomentar que todos los demás hagan todo lo posible para ganarles», asegura el presidente de la FIA en la ‘MTV’ finesa. Y eso es lo que se busca conseguir para el año que viene, ya que la mayor igualdad entre los motores es una de las premisas básicas de los cambios para 2017.
Este año ya se está viendo un acercamiento a los de Brackley por parte de Ferrari y se espera que Red Bull lo haga más con la evolución de Renault, pero ninguno de los dos tienen aún el potencial para ganarles a igualdad de condiciones. Para 2017 se quiere eso y Dieter Zetsche, presidente de Damlier, abrazaría sin reparos una mayor competitividad. «Absolutamente, me gusta cuando todo está apretado. Me gustaría ganar el campeonato en la última carrera por un punto», dice en ‘Channel 4’. Se imaginan…