Educación electoral y confianza

Eddy Olivares Ortega

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A pesar de lo mucho que se ha hablado sobre la complejidad de las Elecciones Generales Presidenciales, Congresuales y Municipales del 15 de mayo del 2016, la mayoría de los electores, por carecer de una educación electoral adecuada, desconocen la causa de esa complejidad.

La educación electoral, de conformidad con la Enciclopedia Electoral ACE, “se lleva a cabo para ayudar a la administración electoral en su tarea de organizar elecciones libres, justas y de la mejor calidad en términos de costo-efectividad”. Además, “comprende la información básica que todo votante debe poseer para poder llegar preparado al sitio de votación y emitir su sufragio”.

Producto de que el constituyente del 2010 unificó las elecciones y, como consecuencia de ello, provocó la escogencia de la totalidad de los cargos de elección popular, excepcionalmente, el mismo día, la Junta Central Electoral está obligada a orientar a los electores, mediante una masiva y efectiva campaña educativa que explique la forma en que serán elegidos los 4,106 cargos que estarán en disputa el 15 de mayo del 2016.

En este momento, próximo al día de las elecciones, la inmensa mayoría de los electores desconoce lo concerniente al proceso de votación.  Esto se debe a que en los colegios que funcionarán en todo el territorio nacional, en cada uno serán habilitadas tres urnas en las que se depositarán las boletas del nivel presidencial, congresual y municipal, respectivamente. En cambio, los colegios del exterior solo dispondrán de dos urnas: una para el depósito de los votos del nivel presidencial y otra para los de los diputados que representarán a esa comunidad. En ese orden, las boletas se denominarán de la manera siguiente: la A para el nivel presidencial, la B para el municipal, la C para el Congresual y la D para el voto en el exterior.

Para tranquilidad de los electores, es conveniente aclarar, que con la única diferencia de que se estarán eligiendo simultáneamente todos los cargos, el proceso de votación será similar a las anteriores elecciones en cada uno de sus niveles.

Por otro lado, debido a que para estás elecciones se estrenará un sistema automatizado de escrutinio y registro de concurrentes, muchos se han confundido y han llegado a creer que se trata de la implementación del voto electrónico.  No es así, el voto sigue siendo manual, igual que siempre.

Sin embargo, lo novedoso para el elector será que al llegar a su colegio electoral tendrá que poner su huella en una unidad de registro de concurrentes en la que se comprobará si forma parte o no del mismo. Este es el único equipo con el que tendrá contacto dentro del colegio electoral.

Los otros equipos que serán incorporados en los colegios electorales son la unidad de escrutinio y la impresora, que serán utilizados, exclusivamente, para el escrutinio, la generación de las actas de concurrentes y de escrutinio y la transmisión de los resultados de las votaciones.

Cuando los colegios cierren sus puertas, a las seis de la tarde, se iniciará el escrutinio.  Debido a las dificultades del escrutinio manual, sobretodo, en el nivel congresual, a causa del voto preferencial, la JCE decidió automatizarlo.

Educar sobre el voto y el escrutinio es una tarea de vital importancia para la calidad y la credibilidad de las elecciones.