PARÍS. Rodeadas por 35 tiburones en una habitación sumergida bajo las aguas, tres parejas han encontrado una manera diferente de pasar lo que consideran una romántica, y diferente, velada en París.
“Ha sido relajante, bonito y muy especial tener una perspectiva que nadie en el mundo puede disfrutar”, aseguró hoy a Efe Kimly Do, una de las ganadoras junto a su pareja del concurso que la empresa estadounidense de alojamiento entre particulares Airbnb organizó para ofrecer una noche en una alcoba submarina en el Acuario de París.
Apasionada de los tiburones hasta el punto de tener uno tatuado en la espalda, esta ingeniera estadounidense de 25 años subrayó la inmerecida mala fama de peligrosos que persigue a estos animales.
Otras dos parejas procedentes de Reino Unido y China, respectivamente, dormirán como ellos en una cama circular rodeada de 3.000 toneladas de agua y con vistas de 360 grados, tras una cena a la luz de velas frente al tanque de los tiburones.
Serán recibidos por el fotógrafo submarino y campeón de inmersión submarina en apnea Fred Buyle, que realizará una danza con estos animales y les transmitirá su “importancia en la preservación del equilibrio de los océanos”, según detalló.
Construida con 14 toneladas de plomo, la plataforma permanecerá en el acuario entre seis y nueve meses más -lo máximo que permite el efecto corrosivo de la sal- para “facilitar el estudio de las interacción, reproducción y costumbres de los tiburones”, de acuerdo con el director de la institución, Alexis Powilewicz.
Sufragada completamente por Airbnb, que no ha precisado su coste, la estructura no perturbará en modo alguno a los animales, que ya se han acostumbrado a nadar a su alrededor, defendió Powilewicz,
Más de 63.000 personas alrededor del mundo participaron en el concurso a través de mensajes que debían ser originales y no superar los 500 caracteres.