AP. Las cuentas en países con ventajas fiscales son a menudo asociadas con gente rica y famosa que comete irregularidades como evadir impuestos, financiar el crimen organizado y facilitar la corrupción. Pero muchas personas utilizan estas cuentas para algo más que ocultar sobornos y lavar dinero.
Las cuenta conocidas como ‘offshore’ pueden ser herramientas financieras no solo para los multimillonarios. Gente común y corriente las utiliza para simplificar sus transacciones con parientes en el extranjero o para tener dinero en países a los que viajan a menudo. O por motivos de peor gusto, como esconder dinero del que pronto será un excónyuge.
Estas cuentas y fondos, y las empresas fachada que en ocasiones se forman para controlarlas, se han visto en el ojo de una tormenta esta semana tras una enorme filtración de documentos confidenciales de un bufete panameño de abogados. Los archivos han mostrado cómo hacen algunas de las personas más ricas del mundo para ocultar sus activos y evitar el pago de impuestos.
Es imposible decir cuántas de esas cuentas tienen propósitos legítimos, indicó Mark Matthews, un fiscal y exsubcomisionado del servicio de rentas internas estadounidense, conocido por sus siglas en inglés, IRS. “Mi impreción es que hay una gran mayoría de personas que tienen motivos legales”, indicó.
Una cuenta offshore es simplemente una cuenta financiera o fondo creado fuera del país de residencia de una persona.
Las agencias regulatorias tienen estas cuentas en la mira ante la posibilidad de que sean usadas con fines ilegítimos. Resulta difícil hacer un recuento exacto de cuántas existen y quién las controla por su propia naturaleza: muchas están diseñadas expresamente para ofrecer anonimato a sus propietarios.
A continuación, varios motivos por los que una persona que no esté entre los súper ricos podría tener una cuenta en el extranjero:
Los migrantes suelen mantener cuentas en su país natal para simplificar gestiones cuando regresan a casa o para ayudar a atender a familiares que se quedan atrás. Esos lazos financieros pueden durar generaciones a través de herencias.
“No son los megarricos, se ve gente de clase media”, indicó Matthews.
Por supuesto, se pueden generar situaciones confusas o complicadas. Matthews señaló que pueden producirse si se mantiene un negocio familiar en el país de origen o si hay secretos familiares. El experto mencionó un caso en el que una mujer nunca le habló a su marido de una cuenta que había abierto su padre años antes porque no quería “que ella se casara con ese estadounidense”.
“Ojalá pudiera vender los derechos para películas, las historias de estas familias son increíbles”, comentó el experto.
Comodidad
Cuando alguien vive fuera de su país de origen puede querer tener acceso sencillo a bancos locales para domiciliar su sueldo, sus facturas o sacar efectivo.
“Parece haber una presunción de que si uno tiene una cuenta en otro país, intenta esconder dinero del gobierno”, dijo Jane Bruno, cuya consultora fiscal en Florida se especializa en ayudar a estadounidenses que viven en el extranjero.
Esa facilidad de acceso en el extranjero puede causar algunos problemas en casa. Las iniciativas para perseguir a los infractores con cuentas en el extranjero han hecho que la situación sea abrumadora para algunas personas que viven fuera y tratan de cumplir la ley. A diferencia de la mayoría de países, Estados Unidos grava a sus ciudadanos sobre todos sus ingresos, independientemente de dónde los obtengan o dónde vivan. Eso puede producir algo de ansiedad en el papeleo.
“Hay bastante angustia en torno a todo el asunto, y mucho miedo sobre lo que puede hacer el IRS”, dijo Bruno.
Algunas personas sacan sus activos del país para protegerlos de una futura demanda, un divorcio u otro ataque de un tercero.
Barry Engel, abogado especialista en protección de activos, dijo que a veces la gente se siente amenazada por su fortuna o su profesión, o quizá ha visto a amigos sumidos en costosas disputas u otros problemas.
En muchos casos, los activos en un fondo extranjero quedan fuera de alcance en una disputa legal.
Empresas
Los propietarios de pequeñas empresas, especialmente de internet, pueden tener clientes en todo el mundo, y puede que tengan poca o ninguna actividad en el país donde residen ellos.
Esas empresas suelen encontrar formas mucho más sencillas -y baratas- de incorporar la empresa en el extranjero, en lugares donde las cuotas de registro o los impuestos son bajos, o donde resulta más fácil procesar pagos procedentes de varios países.
También hay productos financieros que sólo están disponibles en algunos países, que pueden requerir una cuenta en ese país.
A menudo, las cuentas en el extranjero son simplemente un recurso práctico. “Ha habido muchas noticias y cobertura sobre los usos incorrectos, porque, hay que reconocerlo, los usos correctos no son muy emocionantes”, dijo Engel.