Lamentan abandono sisistema de salud y la homosexualidad
La iglesia católica criticó la tarde de hoy, en su tradicional Sermón de las Siete Palabras, la compra de conciencia de los líderes políticos, la inseguridad, las debilidades del sistema de salud y de la justicia, así como la agenda “extraña” a la cultura que, según dicen, quieren imponer desde el extranjero.
En la primera reflexión del sermón: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”, el sacerdote Ángel Sánchez criticó a quienes ven la política como un medio para el enriquecimiento grupal y personal, y no como un servicio destinado al bien común.
“Padre, perdón por los partidos que se sustentan con dinero ilícito de juegos de azar, empresas evasoras de impuestos o de fondos estatales…, en vez de promover una política sana, limpia de corrupción, de lavado o de robo”, indicó.
En tanto que la segunda palabra: “Te aseguro, que hoy estarás conmigo en el paraíso”, diácono Pedro Ramírez, expresó que los dominicanos a no solo escandalizarse por la corrupción en la administración de los fondos públicos, sino también en la corrupción de la conciencia. Agregó que los cristianos católicos no pueden apoyar programas ni proyectos políticos que amenacen la vida humana, desde su concepción hasta la muerte natural.
De igual forma, los sacerdotes señalaron que el pueblo espera de los dirigentes políticos un comportamiento a la altura de los mejores profesionales de la política, “que desarrollen sus actividades proselitistas en base a los programas que desarrollaran en su gobierno”.
“A nuestro pueblo le repugna una contienda política dedicada a sacar al sol los trapitos de los opositores. Nuestro pueblo rechaza una campaña fundamentada en la falsa promesa o en promesas irrealizables”, indicaron.
Criticaron a los partidos que se sustentan con dinero ilícito de juegos de azar, empresas evasoras de impuestos o de fondos estatales, en lugar de promover una política sana, “limpia de corrupción, de lavado o de robo”.
Precisaron que la situación antes mencionada, no creen que la respuesta de los dominicanos en las urnas sea el perdón, sino que será otra cosa.
Asimismo, pidieron perdón al Padre por la indiferencia generalizada frente al manejo “clientelar, moroso e improvisador de algunas instituciones públicas”, así como “las horribles agendas foráneas que nos quieren imponer, extrañas a nuestra cultura, y que no revalorizar la honestidad, la familia, el espíritu de servicio y la solidaridad”.
Además, por la insuficiencia en la mejora del sistema de salud, educativo y energético, la poca seguridad ciudadana, las pocas oportunidades por la juventud, y por el clima de violencia “que nos ha ido arropando poco a poco”.