Hija de la activista asesinada en Honduras pide justicia

hija deNACIONES UNIDAS.-  Berta Isabel Zúñiga, hija de la activista hondureña Berta Cáceres, asesinada el pasado 3 de marzo en su país, denunció hoy en la ONU la falta de justicia y la vulnerabilidad de la mujer en Honduras.

«Los motivos de su asesinato fueron su resistencia y su lucha. Este es un ejemplo de lo que implica defender los derechos civiles y los bienes comunes de la naturaleza», dijo Zúñiga Cáceres en un acto organizado por Amnistía Internacional sobre el papel de las mujeres defensoras de los derechos humanos.

Berta Cáceres, líder indígena de 44 años, defensora del medio ambiente y de los derechos humanos de Honduras, fue asesinada a tiros en su casa, en la ciudad hondureña de La Esperanza.

Una de sus hijas acudió hoy como ponente junto a otras personalidades relevantes en la lucha para la igualdad de género en distintas regiones del mundo.

«Muchas veces, defender la vida significa luchar contra los intereses políticos y económicos del modelo capitalista, racista y patriarcal», señaló en su emotivo discurso frente a más de un centenar de mujeres que ocupaban una de las salas de conferencias de Naciones Unidas.

La joven culpó al Gobierno de Honduras de haberse «desentendido» en la responsabilidad de velar por la vida y seguridad de su madre, que ya había sido amenazada por su labor, y calificó la actitud de las autoridades como «irresponsable» y «preocupante».

Zúñiga, segunda de los cuatro hijos que dejó la líder ecologista de la etnia lenca, pidió justicia «profunda y verdadera» para resolver el caso, «tal como mi madre hubiera querido», agregó.

Por eso, «hay que ir más allá de encarcelar a los actores materiales del crimen y descubrir quiénes estaban realmente detrás del asesinato», insistió.

Los días posteriores a la muerte de la activista el Gobierno de Honduras se comprometió a aplicar «todos los mecanismos de protección vigentes para contribuir en la búsqueda de la verdad» en el caso de Cáceres.

Aun así, la joven, que tomó hoy el relevo de su madre como defensora de los derechos humanos de las mujeres, se mostró «preocupada» de lo que pueda ocurrir en el futuro, puesto que su progenitora era una figura relevante y reconocida nacional e internacionalmente.

«Si también han terminado con ella, ¿qué más puede pasar en este país?» lamentó.

Una semana antes de morir, Cáceres denunció que cuatro activistas de su entorno habían sido asesinados y varios más habían sufrido amenazas.

El asesinato de Berta Cáceres en La Esperanza, al occidente del país centroamericano, desató una ola de protestas internacionales y muestras de apoyo tanto para la familia de la activista como en favor de su causa.

A fin de homenajear a la fallecida y clamar justicia, el próximo 14 y 15 de abril está prevista una manifestación que contará con respaldo internacional en Tegucigalpa, según explicó a Efe el abogado Víctor Fernández, miembro de la Plataforma del Movimiento Social y Político de Honduras.

La hija de Berta Cáceres terminó su discurso recordando una de las citas que su madre solía pronunciar: «Despertemos humanidad, ya no hay tiempo».

EFE