Cámara de Santiago afirma abogados sin escrúpulos forman pandillas para extorsionar empresas

El empresario Juan Manuel Ureña propone mesa de diálogo para reforma Código Laboral

 Juan-Manuel-Ureña

SANTIAGO.-La Cámara de Comercio y producción de Santiago, favoreció ayer una reforma amplia al Código Laboral para propiciar cambios sustanciales que no permita que abogados sin escrúpulos formen pandillas para extorsionar a las empresas.

El presidente de la entidad, Juan Manuel Ureña, indicó que esta legislación no deja espacio siquiera que el trabajador pueda reunirse  tratar de buscar una salida amigable con el empleador

“Desde hace tiempo creo que hacen  falta  cambios sustanciales y reforma al Código Laboral, como lo demanda  todo el sector empresarial  del país”, dijo.

Dijo Ureña que el Código no favorece la evolución sobre todo de pequeños negocios  para que puedan insertarse en el aporte económico al país.

A juicio del joven empresario “debemos entrar en una mesa de diálogo donde si bien es cierto que hay que preservar los  derechos adquiridos de los trabajadores”.

También sostuvo que es cierto que  deben tener una óptica mas ampliadas par que la gran cantidad de pequeñas y medianas empresas que no tributan, lo hagan.

Señaló al ser entrevistado en el programa Encuentro Martinal por Nexxo canal 20 y radio Amistad que uno de los problemas mayores del Código Laboral es su limitación de negociar y compensar a la hora de un despido  del empleado.

El Código Laboral, según el presidente de la Cámara de Comercio y Producción  de Santiguo, esta formulado de una forma tal que propicia que ciertos abogados sin escrúpulos formen pandillas para extorsionar al empresario.

“Pero además, tiene una forma de hacer los cálculos  de prestaciones que muchas veces premia al que mal actúa y no al que permanece, es leal y se destaca por su buen desempeño en el trabajo”, agregó..

Indicó como ejemplo, un empleado que tiene diez años en una empresa, pero tiene la necesidad de dejar la empresas y sale por la puerta grande, pero la ley no obliga a compensarlo, tal vez le tocan 30 mil pesos.

Sin embargo, sostuvo Juan Manuel Ureña que el empleado que se porta mal con ineficiencia, hay que liquidarlo y pagarle 200 o 300 mil pesos, lo que cree es injusto.

Pero, a juicio, del empresario la oficina de abogado que lo representa se queda con el 80% y el trabajador con el 20%.

Dijo que las empresas ceden al chantaje de los abogados porque para la empresa mantener una litis de 2 o 3 años en los tribunales, es mucho más costoso que llegar a un acuerdo con los abogados de los empleados.

“Lo que hacemos es que tratamos de salir de esa litis, aunque los abogados y el empelados no tengan razón”, explicó al participar en el programa que conduce y produce Nelson Peralta.