Puerto Príncipe. El presidente de Haití, Michel Martelly, destacó hoy el acuerdo logrado entre el Gobierno y el Parlamento para evitar que el país caiga en el vacío de poder a partir de mañana cuando concluye su mandato presidencial, sin que se haya elegido su sucesor, al tiempo que llamó a deponer la violencia.
En un mensaje a la nación un día antes de dejar el cargo, el gobernante afirmó que” la historia juzgará nuestra decisiones”.
“Hoy es un día muy importante porque encontramos un acuerdo entre nosotros”, dijo, y subrayó que si bien la comunidad internacional trata de ayudar a la nación, “somos nosotros los que decidimos”.
Mientras Martelly pronunciaba su mensaje, miles de personas se manifestaban en las calles para pedir su salida hoy mismo.
En ese sentido, llamó a sus opositores a abandonar las manifestaciones violentas que, según dijo, solo hacen retroceder a Haití, la nación más pobre de América.
“Cada acto de violencia es un paso hacia atrás para el país”, subrayó el gobernante.
Asimismo, afirmó que “no estamos negociando para ganar sino para buscar soluciones para el país”.
El presidente informó que hablará nuevamente mañana para despedirse de sus compatriotas.
El acuerdo firmando hoy por los poderes Ejecutivo y Legislativo contempla un Gobierno de transición de un mandato de 120 días, que deberá organizar elecciones el 24 de abril próximo.
El presidente que salga de esos comicios deberá jurar el cargo el próximo 14 de mayo, según algunos de los detalles divulgados de este acuerdo, firmado entre Martelly y los titulares de la cámara de Diputados, Cholzer Chancy, y del Senado, Jocelerme Privert.
El pacto político contempla que el Congreso Nacional, bicameral, elegirá a un nuevo presidente “en los próximos días”.
En el marco del acuerdo para encontrar una salida a la crisis electoral, personalidades de la clase política pueden presentarse frente a la Asamblea Nacional para postularse a la Presidencia.
Por su lado, el Parlamento local convocó con carácter de urgencia para hoy mismo a la Asamblea Nacional para discutir el acuerdo logrado con Martelly.
En tanto, la oposición haitiana, agrupada en el denominado G8, propuso este sábado que el presidente de la Corte Suprema de Justicia asuma provisionalmente la Presidencia del país una vez concluya mañana el mandato de Martelly.
A la vez, propone que el primer ministro, en sustitución de Evans Paul, sea elegido entre la clase política local.
A través de una nota de prensa, la oposición señaló que la misión principal del Gobierno de transición debe ser garantizar la paz, crear una comisión que investigue las irregularidades cometidas en la primera ronda de las elecciones presidenciales del pasado 25 de octubre y crear un clima de confianza que permita celebrar comicios libres y democráticos.
Al mismo tiempo, reiteró su apoyo a todas las manifestaciones pacíficas que se realicen en el país.
Haití tenía previsto celebrar el pasado 24 de enero la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, que fueron aplazadas dos días antes por el Consejo Electoral Provisional (CEP) ante la situación de violencia que vive el país y que ha dejado al menos cuatro muertos.
En la primera vuelta de las elecciones presidenciales, celebrada el 25 de octubre pasado, los candidatos que obtuvieron más votos fueron el del oficialista Partido Haitiano Tet Kale (PHTK), Jovenel Moise, y el del opositor Liga Alternativa por el Progreso y Emancipación Haitiana (Lapeh), Jude Celestin.
Este último rechazó participar en la segunda ronda alegando “graves irregularidades” en el proceso.