El aspirante presidencial republicano Donald Trump sigue siendo el protagonista indiscutible de la campaña electoral en EE.UU. a tres días del inicio del proceso de primarias con los caucus de Iowa, donde sus rivales hicieron campaña hoy mientras él volvía a desmarcarse con un mitin en Nuevo Hampshire.
Trump fue el jueves por la noche el gran ausente del último debate televisado entre los aspirantes conservadores antes de los caucus (asambleas populares) de Iowa, con los que empieza el lunes el proceso de primarias de los partidos para seleccionar a sus candidatos a las elecciones del próximo noviembre.
En paralelo a ese debate, al que no acudió por su enfrentamiento con la cadena organizadora, Fox, y una de sus presentadoras estrella, Megyn Kelly, Trump encabezó un acto de recaudación de fondos para los veteranos de guerra.
Ayer, durante su mitin en Nashua (Nuevo Hampshire), Trump dijo que, cualquiera que sea el efecto que haya tenido su ausencia del debate en los sondeos, cree que hizo «lo correcto».
La estrategia de Trump parece haber funcionado porque su ausencia fue lo más comentado antes, durante y después del debate, y además su acto en favor de los veteranos fue televisado por las cadenas CNN y MSNBC.
En internet, Trump también fue el más buscado en Google por un amplio margen, según datos del propio buscador, y en Twitter alcanzó el 37 % de todas las menciones sobre los aspirantes republicanos, muy por encima de rivales como Ted Cruz (18 %) y Marco Rubio (12 %).
El magnate volvió a atacar ayer al senador Cruz, ubicado en segunda posición en Iowa, según los sondeos, y aseguró que su rival salió «golpeado» del debate.
Además, Trump repitió uno de los ataques que más ha usado durante la campaña y que se basa en cuestionar que Cruz, que tiene la ciudadanía estadounidense pero nació en Canadá, pueda ser candidato a la Presidencia sin haber nacido en Estados Unidos.
Según los datos preliminares ofrecidos hoy por la consultora Nielsen, el debate de este jueves fue visto por entre 11 y 13 millones de personas, el segundo peor resultado del ciclo de debates republicanos que comenzó en agosto.
El primer debate, también transmitido por Fox el pasado 6 de agosto y en el que sí estuvo Trump, fue visto por una cifra récord de casi 24 millones de personas.
Al margen de la ausencia de Trump, uno de los momentos más tensos del debate se produjo cuando Cruz, Marco Rubio y Jeb Bush se acusaron mutuamente de haber cambiado de postura en cuestiones migratorias.
Bush atacó a Rubio al recordar que él fue uno de los impulsores del proyecto de ley para una reforma migratoria y que después «se escabulló» porque esa iniciativa «no era popular entre los conservadores», a lo que el senador respondió que fue Bush quien ha pasado de defender una vía a la ciudadanía para los indocumentados a únicamente la legalización.