El presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano, monseñor Nicanor Peña, dijo que en ningún momento ha dado declaraciones a la prensa respecto al futuro del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez dentro de la iglesia Católica dominicana.
“No he dicho lo que se me atribuye y usted sabe que la Iglesia no maneja sus asuntos de esta manera, sino que actuamos conforme al sentido de la prudencia y la discresión. Unos periodistas de Santiago, al salir de una actividad, me siguieron cuando iba hacia mi vehículo y me preguntaron ¿cómo está el Cardenal? Y lo único que les respondí fue: muy bien”.
El obispo Peña llamo a algunos medios para exponerle su profunda preocupación por la difusión de declaraciones que, según dijo, no ha dado expresamente a la prensa en ningún momento.
Mientras, en Santiago, con la presencia de una gran cantidad de obispos al frente de diócesis y eméritos fue celebrada ayer una misa por las bodas de plata del actual rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, Alfredo de la Cruz Baldera.
La misa fue presidida por una gran cantidad de obispos, que viajaron desde diferentes regiones del país, entre ellos el arzobispo de Santiago, Freddy Antonio Bretón y el de La Altagracia y presidente de la Conferencia del Episcopado, Nicanor Peña.
En la homilía, el obispo emérito de San Francisco de Macorís, Jesús María de Jesús Moya, habló sobre el rol del sacerdote como ejemplo de Jesucristo, de quien es fuente e imitador ante el rebaño que son los creyentes.
El mitrado, quien fue que consagró como sacerdote en Nagua hace 25 años a De la Cruz Baldera, rector de la PUCMM, destacó sus dotes de humildad y dedicación a su misión pastoral y su amplia experiencia al frente de centros docentes de la iglesia Católica.
Monseñor Moya destacó las cualidades que adornan la personalidad del sacerdote y académico, como hombre estudioso, devoto, trabajador y perseverante y reconoció el rol de sus padres, ya fallecidos, y hermanos para su formación.