Empieza el Mundial de Fórmula 1 y comienzan los líos. Red Bull acusa a Mercedes de utilizar un mapa motor no contemplado por el reglamento ya que sospechan que incluyen aceite en la mezcla de combustible, algo terminantemente prohibido por la reglamentación. Su utilización posibilitaría obtener un extra de potencia además de depender menos de la parte eléctrica de la unidad de potencia. La protesta de la escudería austriaca no es oficial ya que hasta que no se inicie el campeonato no se puede hacer, pero desde Mercedes ya han contestado.
«Llevamos años con un mapa motor que nos permite rendir con más caballos en clasificación, no es nada nuevo. En Red Bull ven fantasmas. Quizá haya protestas en Australia, pero Mercedes no estamos preocupados por ello», explicaba tajante Toto Wolff, director deportivo, a ‘La Gazzetta’. Habrá que esperar que comience la acción este fin de semana en Albert Park para saber qué sucede con este asunto.